Este artículo se publicó hace 6 años.

FranquismoAugust Gil Matamala: "Es grave que juristas estén dispuestos a poner la unidad de España por encima de la legalidad"

El abogado August Gil Matamala. M. F.

Barcelona-

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Le acaban de dar la Medalla de Oro al Mérito Cívico de Barcelona, entre otras cosas en reconocimiento por ser una "voz resistente, crítica y sólida, discreta y perseverante bajo cualquier circunstancia". Su trayectoria lo define como una persona comprometida y coherente, que casi siempre ha estado con los derrotados. ¿Que le lleguen homenajes como este le hace pensar que, a pesar de todo, algunas cosas han cambiado?

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'August Gil Matamala. Al principi de tot hi ha la guerra', el libro que escribieron sobre usted Anna Gabriel y David Fernández, ¿Ha servido para que una parte de la población catalana lo descubra?

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La resistencia antifranquista también tiene una historia oficial y una parte que ha quedado fuera.

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Nace en 1934 y sus primeros años de vida están marcados por la ausencia de su padre, Augusto Gil Cánovas, que se fue al exilio y cuando vuelve vivió un tiempo en la clandestinidad. Una vez entra en el PSUC, en la universidad, usted también conoce directamente la clandestinidad. ¿Una experiencia como ésta marca de por vida?

Imagino que la clandestinidad también condiciona las relaciones familiares. Tenía tres hijos y, al mismo tiempo, una intensa actividad antifranquista.

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Hay mucho mito alrededor del PSUC. Usted entra a militar en 1956 y lo deja en 1968, según dice porque el partido había renunciado a la transformación del sistema y del orden social. En cierto modo se anticipa a lo que pasará después, durante la Transición.

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Después se acerca a los movimientos de autonomía obrera y a partir de la Transición al independentismo de izquierdas.

Ya no vuelve a militar en ningún partido, ¿verdad?

Dando un salto en el tiempo, si los años 70 los independentistas eran cuatro gatos, ahora es evidente que esto no es así y al menos la mitad de la sociedad catalana lo es. ¿En aquella época se imaginaba este escenario?

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En este terreno ahora se vive un impasse, con dirigentes en prisión y juzgados y otros en el exilio. Y con la sensación de que no existe mucho una estrategia de hacia dónde ir. En alguna entrevista le he leído que entiende que haya momentos de repliegue siempre que no se renuncie al objetivo final. ¿El independentismo se está replegando?

¿Pero cree que ahora esta parte de la sociedad catalana es más consciente de lo que hay en el otro lado y que España no es un estado en fallida?

Hace un par de meses que arrancó en el Tribunal Supremo el juicio al 'Procés', que ha calificado como "político". Con lo que ha visto hasta ahora, ¿cree que la acusación por rebelión puede sostenerse de alguna manera?

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Entonces, ¿como lo interpreta?

¿Cree que habrá condenas?

Usted ha vivido muchos juicios políticos en el Tribunal de Orden Público (TOP) franquista y después en la Audiencia Nacional, que le sucedió. ¿Hay alguna experiencia o lección que sea válida para el juicio actual?

Se ha pasado décadas y décadas luchando en defensa de los derechos fundamentales. No sé qué piensa de la actual situación global, con muchos ejemplos de amenazas hacia derechos que parecían consolidados.

Marc Font

Periodista con formación en economía social y solidaria, es coordinador de Públic. Trabajó en medios como la Directa o Crític y en Producciones del Barrio, entre otros. Escribe sobre política catalana, movimientos sociales, medio ambiente y emergencia climática, memoria democrática y economía. Antes, ejerció como freelance en Irlanda, Palestina y Uganda. Periodista amb formació en economia social i solidària, és coordinador de Públic. Ha treballat en mitjans com la Directa o Crític i a Producciones del Barrio, entre d'altres. Escriu sobre política catalana, moviments socials, medi ambient i emergència climàtica, memòria democràtica i economia. Fa uns anys va exercir com a freelance a Irlanda, Palestina i Uganda.

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