El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha mantenido en la tarde de este mates, 30 de julio, su tradicional despacho veraniego con el rey Felipe VI para hacer balance político y económico del curso. Una vez finalizado, pasadas las 20 horas, el líder del Ejecutivo ha comparecido ante los medios. Sánchez ha sacado pecho de los últimos datos económicos conocidos y se ha comprometido a hacer de la creación de vivienda su principal objetivo. Por otro lado, ha evitado hablar de su querella contra el juez Juan Carlos Peinado y ha defendido el preacuerdo entre el PSC y ERC para investir a Salvador Illa como president de la Generalitat de Catalunya.

En cuanto a la valoración que le han pedido los periodistas sobre la querella al juez Peinado, Sánchez ha citado a la audiencia a este miércoles, cuando comparecerá en La Moncloa también para valorar el año político, a las 11 horas. Ahí sí dará explicaciones.

La conversación con Felipe VI, a juzgar por las palabras de Sánchez, se ha desarrollado con el tema central de la economía. "En un año difícil y complejo desde el punto de vista internacional", ha empezado el líder del Ejecutivo, "España se coloca a la vanguardia".

Ha citado los datos del Producto Interior Bruto (PIB), que "crece al 2,9% desde el punto de vista interanual" y al "0,8% en términos intertrimestrales" —"más de lo que se preveía", ha apuntillado— y también la buena "evolución de la inflación" que implica que los precios de los alimentos y de la electricidad sufran una "desaceleración", que es "beneficiosa para el bolsillo de los ciudadanos".

Ha asumido, en línea con su propio discurso de investidura, la creación de "vivienda asequible" como uno de los grandes retos de la legislatura. El Ejecutivo se ha comprometido a terminarla con 180.000 viviendas disponibles a precios accesibles. Sánchez ha subrayado que 80.000 de ellas ya se encuentran en distintas fases de su construcción.

En lo referente al acuerdo con ERC para investir a Salvador Illa, que incluye impulsar "un sistema de financiación singular que avance hacia la plena soberanía fiscal, basado en la relación bilateral con el Estado y la recaudación, gestión y liquidación de todos los impuestos" para Catalunya —criticado por el PP por ir demasiado lejos y por Junts por quedarse demasiado corto—, ha asegurado que preserva la "solidaridad interterritorial", avanza en igualar la calidad de los servicios sociales en los distintos territorios y potencia la "igualdad de todos los españoles". 

Sánchez ha querido remarcar, además, que su Gobierno ha transferido a las comunidades autónomas "300.000 euros más" que el Ejecutivo de Mariano Rajoy y sin contar con los fondos Next Generation, por lo que no va a "aceptar lecciones del Partido Popular".