Este artículo se publicó hace 2 años.
Moreno y Feijóo, juntos pero no revueltos
El presidente de la Junta ha centrado todo en Andalucía, eludiendo conflictos que trasciendan este territorio, para conseguir así que sea "una campaña tranquila".
Málaga-Actualizado a
La postal roza la perfección. Tras el escenario, el Teatro Romano y encima, la Alcazaba. Detrás del público, unas 3.500 personas, la mítica taberna El Pimpi. A la izquierda, según se mira a la tarima, el Cine Albéniz, donde tanto han brillado las estrellas en el Festival Internacional de Cine de Málaga. Y a la derecha, la Casa Hermandad del Sepulcro, que da cobijo a dos de los tronos más impresionantes de la Semana Santa, el Jesús del Santo Sepulcro y el de la Virgen de la Soledad. Ambos desfilan el Viernes Santo.
Este es el escenario elegido por el PP para celebrar el acto central de la campaña de las elecciones andaluzas del 19J. Y eso que al principio cuesta adivinar que es un mitin del PP, hay que fijarse mucho, pues las siglas y el logo del partido se esconden en todos los diseños y carteles. Las banderas de plástico depositadas con mimo en las sillas antes del acto no enseñan la gaviota, son banderas andaluzas, blanquiverdes. Al acabar el mitin, no suena el divertido himno de los populares.
Y es que ese es el reto principal de Juan Manuel Moreno Bonilla para esta campaña electoral: conseguir que la ciudadanía asimile la idea Andalucía con el propio Moreno y que olvide lo que durante mucho tiempo era una asociación indivisible, Junta de Andalucía-PSOE. Esta tierra, por primera vez en la recién finalizada legislatura, no ha estado gobernada por el PSOE, partido que se mantuvo en el poder durante 37 años consecutivos.
Para ello, sorprendentemente, por primera vez esta campaña (no así en la precampaña), Moreno ha compartido escenario con Alberto Núñez Feijóo. Y es que el presidente de la Junta se ha empeñado en centrarlo todo en Andalucía, no tratar conflictos que trasciendan este territorio, para conseguir así que sea "una campaña tranquila". Los vientos de cola sobran en el autobús de campaña del "popular" y la izquierda parece desmovilizada. "¿Para qué reactivar viejos demonios?", parece que piensa Elías Bendodo, el jefe de campaña del PP.
Feijóo ha aprovechado el escenario para impartir su teoría (ya presentada en el Senado el pasado martes en su primer cara a cara con Pedro Sánchez en el Senado): el Gobierno de Sánchez es un Ejecutivo dividido y que gobierna para minorías; su alternativa (y la de Moreno) aspira a hacerlo para las mayorías a través de la gestión, gestión y gestión.
El equipo del PP andaluz no menta ni a Vox ni a Macarena Olona. De hecho, Moreno viajaba este sábado a Alhaurín el Grande. "El pueblo donde está enterrado mi padre, uno no tiene que olvidar sus raíces", pronunciaba en el mitin de Málaga. Implícitamente era un dardo para Olona, que no es andaluza, sus raíces están en Alicante. Explícitamente, sin embargo, lo dijo Feijóo: "La estabilidad solo la puede conseguir un andaluz".
Olona se ha escondido en mitad de campaña. Las malas lenguas no callan por Andalucía. Algunas dicen que la ausencia de la candidata ultra en la agenda pública tiene que ver con que le ha dado vértigo la campaña. Otras, sin embargo, analizan que hay un preacuerdo ya escrito entre PP y Vox para compartir el Gobierno de la Junta. Y que han llegado a la conclusión de que la Olona más radical puede reactivar a una izquierda desmovilizada.
Termina el acto. Y el suelo de tan preciado escenario es un mar de plásticos. Las banderolas blanquiverdes se escampan sobre las piedras. Y también los tetrabriks que el partido ha regalado al público y periodistas con agua, para soportar el calor. En estos recipientes, también blanquiverdes, se puede leer: "Andalucía Avanza. Juanma Presidente. Agua". Ni rastro del PP en la Alcazabilla, calle por la que desfilan todos los viernes santos el Jesús del Santo Sepulcro y la Virgen de la Soledad con la banda de música. Ambos tronos juntos, pero separados. Como Moreno y Feijóo. Juntos, pero no revueltos.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.