Fernando Grande-Marlaska ha vuelto a defender la actuación de la Guardia Civil y de los gendarmes marroquíes en la valla de Melilla el viernes 24 de junio, día en el que murieron 37 personas según la ONG, aunque la cifra puede ser incluso superior según las declaraciones de los migrantes que vivieron la tragedia.

El ministro del Interior parece haber rebajado el tono respecto a las imágenes en exclusiva de Público que muestran cómo los efectivos de Marruecos atraviesan la frontera y acceden a suelo español para practicar devoluciones en caliente.  "No saquemos conclusiones anticipadas respecto a lo acontecido", ha indicado a pesar de las pruebas gráficas que revelan la actuación de los agentes españoles y marroquíes. 

Las fotografías y el vídeo se tomaron el viernes 24 de junio entre las 9.26 y las 10.21 horas de la mañana. El intento de los migrantes de asaltar la valla se produjo sobre las 8.30 horas. El siguiente mapa refleja el lugar en que se obtuvo el contenido visual, punto que pertenece a territorio español, y las evidencias que contradicen la versión defendida por el ala socialista del Gobierno sobre la presunta actuación "legal" y "proporcional".

La información de las ONG contradicen al ministro

Marlaska ha subrayado que "se ha actuado" bajo parámetros "nacionales e internacionales con la proporcionalidad y adecuación a la situación concreta". Ha reiterado que "fue un ataque violento" y que un Estado de derecho "no se puede permitir la violación de la integridad física de nuestros cuerpos de seguridad". 

Algo que choca con la información trasladada por las ONG, que denunciaron la violencia de las fuerzas de seguridad marroquíes y españolas contra las personas que trataron de atravesar el muro. 

El ministro, que ha lamentado conjuntamente la muerte de los migrantes y de los heridos policiales, ha vuelto a enarbolar el discurso de los "ataques violentos" contra las fronteras. Además, preguntado por el aumento del gasto militar, ha defendido que incrementar el presupuesto a pesar de las críticas del socio minoritario del Gobierno. 

Ha argumentado que el compromiso de España es defender "los valores democráticos" y que es compatible "subir la inversión en seguridad" con mantener la inversión en educación o en sanidad. Por esta razón ha remarcado la "importancia" del papel de la OTAN para construir un "espacio de seguridad" ante la invasión de Rusia a Ucrania.