El Partido Popular lleva días pidiendo que gobierne la lista más votada. Los cargos del partido no han parado de reivindicarlo tras las elecciones generales del 23J, en las que el PP ha sido primera fuerza, e incluso Feijóo ya le proponía a Sánchez ese acuerdo durante la campaña electoral. Pero los populares no siempre aplican ese mantra de que gobierne la lista más votada.

El PP ostenta la alcaldía en 218 municipios donde el pasado 28 de mayo no consiguió ser la lista más votada en las elecciones municipales. Entre ellos hay grandes ciudades y capitales de provincia, como Elche, Alcalá de Henares, Guadalajara, Valladolid, Burgos, Toledo, Calvià, Talavera de la Reina, Ponferrada o Jaén, pero también municipios medianos y pueblos más pequeños.

En España hay un total de 684 municipios en los que su alcalde o alcaldesa no lideró la lista más votada el 28M, según el análisis realizado por Público de los resultados de las elecciones municipales y la base de datos de cargos locales del Ministerio de Política Territorial. Casi un tercio de esos municipios están en manos del PP. Otros 189 son alcaldes socialistas y 277 de otras formaciones políticas.

El más grande de todos ellos es Barcelona. En la capital catalana el partido más votado el pasado 28M fue Junts. Los de Puigdemont pactaron con Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) para gobernar la ciudad, pero no sumaban mayoría absoluta. Quien sí la logró fue el PSC, que consiguió la alcaldía después de que Barcelona en Comú y el PP votaran a favor de su candidato, Jaume Collboni.

En aquella ocasión los partidos independistas se quejaron del pacto que les quitó el Gobierno municipal. Es algo bastante común: el partido más votado cuando no consigue gobernar tiende a acusar a los otros de no respetar la voluntad popular. Esperanza Aguirre cuando el PSOE apoyó a Manuela Carmena para convertirse en alcaldesa de Madrid en 2015 hablaba de "coalición de perdedores". Cuatro años después el PP, que había sido segunda fuerza, sumó sus votos a Ciudadanos y Vox para quitar la alcaldía a Carmena.

Los partidos acostumbran a olvidar que en España hay un sistema parlamentario y, por tanto, consigue gobernar quien recaba más apoyos. De hecho, los ciudadanos cuando votan en unas elecciones generales escogen a los diputados que ocupan escaño en el Congreso. Son los parlamentarios quienes luego deben elegir al presidente del Gobierno. Incluso podrían optar por alguien que no se hubiera presentado a las elecciones y no fuera diputado.

Pero la derecha lleva un tiempo —especialmente desde que Feijóo llegó al PP y las encuestas volvieron a situarlos como primera fuerza— abonada, de nuevo, a ese mantra de que tiene que gobernar la lista más votada. Aunque luego no lo aplican si no consiguen ser primera fuerza.

"La lista más votada" si somos nosotros

Multitud de barones del partido han salido a apoyar a su líder y pedir que se le deje gobernar porque el PP fue la formación con más votos el pasado 23J. Entre ellos: Isabel Díaz Ayuso, Juanma Moreno Bonilla, María Guardiola, Alfonso Fernández Mañueco o Fernando López Miras. Lo que olvidan todos ellos es que no eran los más votados cuando llegaron al poder tras sus primeras elecciones como candidatos. Todos ellos necesitaron el apoyo de Ciudadanos o Vox para poder convertirse en presidentes autonómicos y desplazar al PSOE, que había conseguido ser primera fuerza.

Esos pactos para gobernar no se dan solo en las comunidades. El PP gobierna en 3.127 ayuntamientos tras ser la lista más votada el pasado 28M, pero también en esos 218 en los que no lo fueron y necesitaron de acuerdos con otros partidos.

A nivel municipal ese tipo de pactos no se dan tanto como a nivel autonómico por una razón. En los ayuntamientos se produce una excepción: si cuando se constituye la corporación ninguno de los candidatos logra la mayoría absoluta entre los concejales, el que lidera la lista más votada se convierte en alcalde. La normativa electoral recoge esta condición porque las elecciones se celebran a la vez en todos los municipios y así se evita que se puedan producir situaciones de bloqueo y se tengan que repetir elecciones solo en determinados pueblos o ciudades.

Tras unas elecciones generales y en la mayoría de comunidades, en cambio, si ningún candidato consigue mayoría absoluta o más síes que noes en el Parlamento, las elecciones se vuelven a celebrar. De hecho, ya pasó en 2016 y 2019, las dos repeticiones de elecciones generales que ha habido desde la Transición.

Municipios con pactos de Gobierno

El PP, que fue el partido más votado el pasado 28 de mayo, es la formación que lidera más Gobiernos municipales. A sus más de 3.000 alcaldías le sigue el dato del PSOE. Los socialistas tienen más de 2.000 alcaldes que gobiernan tras haber sido los más votados, pero otros 189 han llegado al puesto tras conseguir sumar la mayoría junto a otras formaciones.

No son los únicos que han construido pactos con otras formaciones para conseguir alcaldías. Por ejemplo, Vox cuenta con 33 alcaldes a lo largo del país: seis de ellos no lideraron la lista más votada.

Tras Barcelona las ciudades más pobladas que no están gobernadas por la lista más votada son Valladolid, Gijón, Vitoria-Gasteiz
A Coruña, Elche y Santa Cruz de Tenerife. En Valladolid el popular Jesús Julio Carnero desplazó al anterior alcalde, el socialista Óscar Puente, aunque el PSOE fue la lista más votada. Algo similar sucedió en Gijón, donde desde el 28M la alcaldesa vuelve a ser Carmen Moriyón, de Foro Asturias, tras pactar con PP y Vox. La lista más votada en Gijón también fue la del PSOE.

Pero esos acuerdos no han sido solo cosa de la derecha. Los socialistas además de dejar a Junts sin la alcaldía de Barcelona, también han necesitado de acuerdos en otras grandes ciudades, como Vitoria-Gasteiz y A Coruña. En Vitoria la primera fuerza fue EH Bildu, pero los socialistas vascos gobiernan con el PNV tras sumar sus votos y también los del PP para llegar a la mayoría absoluta. En A Coruña el pacto fue con el BNG y la fuerza más votada había sido el PP.