La Ingobernable logra okupar durante dos horas la simbólica sede del Patio Maravillas en Pez

La Ingobernable anunciaba a las 19 horas de este viernes la apertura de un nuevo centro social en el número 21 de la calle del Pez, antigua ubicación del Patio Maravillas, otro espacio autogestionado. El colectivo inauguraba el lugar con una concentración de unas 200 personas. Horas después, la Policía ha intentado desalojar el edificio, pero no lo ha conseguido.

Sin embargo, a eso de las 20.15 horas, la Policía procedía a desalojar el edificio tras la intervención de los antidisturbios. En total, la okupación ha durado aproximadamente dos horas. 

En un vídeo publicado, los activistas han hecho una campaña en la que denuncian las políticas del PP en Madrid, poniendo el énfasis en los desahucios, la especulación inmobiliaria y la contaminación de la ciudad. "Amor por construir mundos nuevos", sentencia La Ingobernable.

El Centro Social Patio Maravillas estuvo autogestionado desde enero

de 2010 hasta junio de 2015. Previamente, en 2006, Procasa había comprado el edificio por 12 millones de euros, en una operación de especulación inmobiliaria. Después de la desokupación, el inmueble pasó a ser propiedad del Grupo Nivel 29, que ha tratado de ofrecer el edificio para la actividad turística, a pesar de estar destinado al uso residencial. 

Tras esta acción, el colectivo ha convocado la primera asamblea para este domingo en la que comenzará "un proceso constituyente". Así, La Ingobernable ha invitado a los vecinos de Madrid a participar para "ampliar las alianzas y actualizar el papel que juegan los centros sociales en la construcción de las luchas de la ciudad".

El primer hogar de La Ingobernable estaba situado en el número 30 del Paseo del Prado, centro que mantuvieron ocupado desde mayo de 2017 a noviembre de 2020. En ese año, el alcalde de Madrid los desalojó del edificio. Los activistas, posteriormente, consiguieron con éxito tomar en mayo de 2021 un bloque en la calle Cruz 3 y 5, donde establecieron su Oficina de Derechos Sociales (ODS). Sin embargo, Martínez Almeida, una vez más, expulsó un año después al colectivo de aquel lugar.