MADRID.- Ferraz se siente con suficiente fuerza ya para abrir la “batalla de Madrid” y este lunes se reunirá la gestora del partido para convocar formalmente un Congreso Extraordinario el 31 de julio, con una elección previa entre militantes que decidirán quién estará al frente de la Secretaría General del Partido Socialista de Madrid (PSM).

Tras la fulminante destitución de Tomás Gómez en febrero, Ferraz nombró una gestora hace cuatro meses y medio, presidida por Rafael Simancas, con un mandato de seis meses para convocar el Congreso.

Dicho mandato, además, se podría haber prorrogado otros seis meses más. Pero la dirección federal, de acuerdo con la gestora, han decidido poner en marcha el Congreso que, aunque tenga carácter extraordinario, contará en la práctica como un Congreso ordinario.

Aunque desde Ferraz se dice que se mantendrá neutral en todo el proceso, el nombre de la alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, parece la opción del “aparato”. Hernández sustituyó a Pedro Castro al frente de la agrupación getafense, ha estado en la gestora y mantiene una excelente relación con el líder del PSOE, Pedro Sánchez, que no dudó en ir a apoyarla durante las elecciones del 24-M que le dieron la Alcaldía.

Pero todo apunta a que en esta ocasión sí habrá primarias y con más de un candidato. Tomás Gómez aún mantiene bastante poder en una parte de la estructura orgánica en Madrid y, aunque en ningún caso se presentará él, sí impulsará una candidatura alternativa y tendrá avales y votos para dar la batalla.

La alcaldesa de Getafe, Sara Hernández, es la baza de Pedro Sánchez, mientras el sector cercano a Tomás Gómez baraja varios candidatos

Varios nombres se barajan ya, pero los ojos están puestos en Antonio Miguel Carmona, amigo de Gómez, aunque no por ello deja de mantener relación con Ferraz. Carmona, según explicó a Público, dice que aún no le ha dado tiempo ni de pensar en la posibilidad de aspirar a ser el secretario general del PSM y que está centrado en su labor en el Ayuntamiento de Madrid. Pero, a su vez, reconoce que ha tenido varias llamadas de secretarios generales madrileños animándole a dar el paso.

La decisión que finalmente tome Carmona condicionará mucho todo el proceso y, sobre todo, si hay lista alternativa a Sara Hernández.

Pero el PSM, la antigua Federación Socialista Madrileña, siempre ha sido convulso, polémico y sorprendente. Siguen teniendo mucho peso figuras veteranas como Juan Barranco o el ex alcalde de Fuenlabrada, José Quintana; así como el actual edil de esta localidad, Manuel Robles. De sus posicionamientos dependerá buena parte de cómo transcurra el proceso.

Sin embargo, en Ferraz se da por seguro que el proceso les saldrá bien y que lo tienen muy amarrado. Dicen que Gómez, que controlaba la mayoría del partido en Madrid, ha perdido muchos apoyos desde su destitución, y la dirección federal cuenta con las bazas de que conoce muy bien el PSM. No en vano Simancas fue secretario general y ahora es hombre confianza de Pedro Sánchez; Antonio Hernando, portavoz parlamentario y que llegó a sonar hasta como candidato a secretario general del PSM se ha recorrido todas las agrupaciones en decenas de ocasiones; y el propio Pedro Sánchez hizo su carrera política en la federación madrileña. Todo ello le da ahora un peso específico.

Madrid, además, tiene también mucha importancia de cara al Congreso que el PSOE tendrá que celebrar a principios de 2016. Es la tercera federación del PSOE y de su ubicación política pueden depender muchas cosas en el futuro. En un mes, la solución.