Venezuela, Cuba, la migración o la crisis territorial de Catalunya. La oposición de PP y Ciudadanos ha echado el resto en la sesión de control al Gobierno de este miércoles, un Pleno que los grupos han utilizado para empezar a marcar sus posiciones políticas de cara a las elecciones generales de abril.

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha protagonizado duros encontronazos con Albert Rivera y Pablo Casado. El líder del PP ha increpado a Sánchez por el diálogo con las fuerzas independentistas y ha asegurado que "si no le hubiéramos pillado, usted les hubiera dado la independencia". 

El líder del Ejecutivo ha defendido un balance de su Gobierno "en positivo". "Este Gobierno no estaba tan pendiente de defenderse ante los tribunales por la corrupción y sí que estaba más pendiente de defender a los ciudadanos". Sánchez ha sostenido que durante su mandato se ha creado "empleo indefinido", y se ha "redistribuido el crecimiento". "Nos hubiera gustado hacer muchas más cosas, como aprobar unos Presupuestos sociales.  Si la Cámara me da su confianza tras las elecciones, lo haré".

"Nadie ha hecho tanto daño a España en tan poco tiempo", le ha contestado Casado, que ha realizado un balance muy distinto al presentado por el Ejecutivo. "Se destruyen 6.000 empleos todos los días; quieren tumbar la reforma laboral con el rodillo de los decretazos; han malogrado el acuerdo del brexit; ha visitado al dictador en Cuba y no ha condenado al de Venezuela". El líder de los conservadores ha zanjado su intervención acusando a Sánchez de "vender la nación".

"Tiene usted la lengua larga del insulto y las patas cortas de la mentira", le ha respondido el presidente, que ha afeado a Casado "la foto de la involución en Colón". El líder del PP ha acabado por acusar de "vender la nación" a Sánchez, que ha definido el proyecto de los conservadores como el dibujo de una España "en la que solo caben ustedes".

También el líder de Ciudadanos ha fijado su posición en una intervención que ha centrado casi de forma íntegra en Catalunya. Rivera ha intentado que Sánchez se comprometa a no negociar con Torra y los independentistas y a no otorgar "indultos" a los políticos presos del "procés" si las sentencias de los tribunales aseguran que cometieron algún delito. Sánchez le ha afeado que cambiase la pregunta (Cs había registrado una cuestión para que el líder del Ejecutivo valorase la situación política), y se ha negado a responder a la pregunta oral, que no estaba registrada.

"No contesta porque no puede contestar. Necesita ser presidente con los golpes de Estado", ha afirmado Rivera durante su segunda intervención, en la que ha reafirmado la posición de su partido anunciada esta semana de no hacer pactos ni con Sánchez ni con el PSOE: "Por eso nunca podremos apoyar a un presidente como usted. Yo me metí a política para que no haya presidentes como usted. Olvídese de cualquier pacto que no pase por populistas y por independentistas. Espero que haya un gobierno constitucionalista tras las elecciones".

El presidente del Gobierno ha acusado a Rivera de liderar "el cambio de la chaqueta permanente". "Después de la foto con Abascal y Casado, usted debe tener un armario lleno de chaquetas. Dejó la chaqueta liberal y se puso una chaqueta que huele a naftalina, la de la extrema derecha".

Montero: "Deje de hacer recortes por la puerta de atrás"

Irene Montero también ha entrado en el terreno de la precampaña. La portavoz parlamentaria ha acusado al Gobierno de estar aplicando "recortes por la puerta de atrás", los "Presupuestos de Rajoy" y "haber roto el diálogo con Catalunya". Siguiendo estas tres críticas, Montero ha defendido que el voto a su partido es el único "voto útil" para garantizar los derechos sociales y frenar a la derecha: "Todos saben que pactarán con los señores del PP si les hace falta".

La diputada de Unidos Podemos ha asegurado desde el pleno del Congreso que sin la presión de su grupo, el Gobierno nunca hubiera aceptado medidas como la subida del SMI o "los Presupuestos más sociales de la historia". De hecho, ha acusado al presidente del Gobierno de realizar recortes "por las puertas de atrás" y ha afirmado que el Ejecutivo aprobó una orden ministerial "en secreto" por la que se ha limitado al 50% el gasto de todos los Ministerios.

El presidente del Gobierno ha pasado por alto esta acusación y ha reprochado a Montero el tono de "precampaña". Sánchez ha decidido agradecer el apoyo de Unidos Podemos durante la legislatura, pero también ha contraatacado y recriminado al grupo que rechazara el decreto del alquiler y que hayan decidido no apoyar el acuerdo del Pacto de Toledo. "Me gustaría que ustedes reflexionaran y vuelvan al Pacto", ha pedido Sánchez.