La nueva etapa de Isabel Díaz Ayuso ha comenzado tal y como ella quería: sin ataduras. La presidenta madrileña y candidata a la reelección por el PP ha obtenido 65 escaños, a cuatro de la mayoría absoluta, en los comicios que ella misma convocó en el mes de marzo con la intención de librarse de Ciudadanos. Objetivo conseguido: el partido 'naranja' ha desparecido de la Asamblea de Madrid y el Partido Popular suma más escaños y más votos que todo el bloque de la izquierda de manera conjunta. La sensación que recorre toda la planta de Génova 13 es la de "cambio de ciclo" que se trasladará en toda España. Nada que ver con el discurso de hace dos meses, al sacar el peor resultado de su historia en Catalunya.

La presidenta madrileña ha bajado los cuatro escalones que separan la primera planta de la sede del PP del balcón y ha sido aclamada por un público que ya estaba celebrando su victoria con apenas el 10% escrutado, en un ambiente que se parecía al de la época precovid, con un DJ amenizando el final de la jornada electoral y el inicio del escrutinio. Son varios los cargos que trazan paralelismos entre este resultado y el de Mariano Rajoy en 2011 con su mayoría absoluta o con el de Esperanza Aguirre en el año 2007 con 67 escaños.

Ayuso ha sido aclamada al grito de 'libertad' y de 'presidenta', con banderas del España y del PP ondeando por la calle Génova. Acompañada por Pablo Casado y el resto de la dirección nacional del PP, se ha reivindicado como la oposición al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. "No entienden nuestro modo de vida, por eso el sanchismo no entra en Madrid", ha celebrado. Lo cierto es que el PP ha arrasado en todos los distritos de la capital, incluidos feudos históricos de la izquierda como Vallecas, y ha sacado un millón de votos más que el PSOE en la Comunidad de Madrid.

"España es otra cosa, señor Sánchez y aquí viene lo mejor de cada rincón del mundo a vivir en paz y libertad. Ser madrileño de Portugal, madrileño de Cuba, de Córdoba, de Chamberí", ha proseguido. Para la presidenta madrileña, "hoy empieza un nuevo capítulo en la historia de España" porque "vamos a recuperar el sentimiento de pertenencia, la cultura del esfuerzo y, por encima de todo, la convivencia, la unidad y la libertad que necesita España".

Por su parte, el máximo líder de los populares ha asegurado que "el triunfo de Ayuso es una moción de censura democrática al sanchismo". Casado lo ve como "el kilómetro cero del cambio" y como la prueba palpable de que "hay partido" y "se puede ganar a Pedro Sánchez" a nivel nacional.

Ayuso quería contar con una mayoría suficiente para poder gobernar en solitario, pero necesitaría el apoyo de Vox para o, al menos, o una abstención en su futura investidura. La candidata ultraderechista, Rocío Monasterio, ha anunciado esta misma noche que "en los próximos días facilitará la investidura" de la presidenta madrileña sin pedir contrapartidas a cambio.