EH Bildu anuncia su voto favorable al decreto de las medidas anticrisis y posibilita su aprobación en el Congreso

EH Bildu votará a favor del decreto ley de medidas anticrisis, por lo que posibilitará previsiblemente su convalidación en el Congreso e impedirá una derrota parlamentaria del Gobierno, ya que hasta ahora no tenía atados los apoyos suficientes para sacarlo adelante. Y todo ello, a pesar de que su votación coincide con un momento de la legislatura muy complicado en las relaciones con los socios, sino el que más, a raíz del estallido del caso Pegasus.

"La confianza está tocada y aún más tocada quedará si no cumplen con la ciudadanía y si los ciudadanos ven que actúan como la derecha", ha advertido la portavoz de la coalición abertzale, Mertxe Aizpurua, durante el debate de la norma. Los cinco diputados de EH Bildu son imprescindibles en una votación que, desde luego, se prevé ajustada.

En este sentido, estos votos se sumarán presumiblemente a los del PSOE (120), Unidas Podemos (33), PNV (5), PDeCAT (4), Más País (2), Compromís (1), BNG (1) Teruel Existe (1), Nueva Canarias (1), PRC (1) y al de la exdiputada del grupo morado Meri Pita, adscrita al Grupo Mixto. El total, todos ellos suman 176 síes, un resultado que, aunque ajustado, sería suficiente para que el decreto reciba el visto bueno de la Cámara Baja. En esta línea, y a tenor de la predisposición mostrada por el Ejecutivo a última hora de la tarde, la norma se tramitará como proyecto de ley para incluir medidas de los grupos.

"El Gobierno ha aceptado que este decreto sea tramitado como proyecto de ley, negociaremos y acordaremos para mejorar y ampliar este decreto tan necesario", ha defendido Aizpurua, cuyo grupo actuará nuevamente "con responsabilidad" permitiendo la aprobación del plan de choque para hacer frente al impacto de la guerra en Ucrania.

La norma incluye, entre otras medidas, la prórroga hasta el 30 de junio de las rebajas fiscales de la electricidad, el incremento del 15% del Ingreso Mínimo Vital, la bonificación de hasta 20 céntimos por litro de gasolina, la ampliación de los bonos sociales y la limitación de la subida del alquiler al 2%. "Hoy miles de familias necesitan de una protección adicional frente a la crisis que estamos viviendo y sus duras consecuencias. Nosotras queremos poder ofrecérselo".

Aizpurua también ha criticado duramente la actuación del Gobierno en relación a la brecha abierta por el espionaje masivo a líderes y activistas relacionados con el independentismo, reconociendo incluso que la confianza con el Ejecutivo de Pedro Sánchez está "quebrada". No obstante, su voto favorable es "por la gente, no por el Gobierno", ha zanjado.

ERC votará en contra

La diputada de ERC, Montserrat Bassa, ha sido la encargada de comunicar desde la tribuna de oradores el sentido del voto de los 13 diputados republicanos, que no será otro que un no debido al Catalangate. Y es que este caso ha tensado al máximo sus relaciones con los de Pedro Sánchez. En este sentido, Junts y la CUP también han justificado su voto contrario al decreto por el espionaje a los políticos y activistas independentistas. No será el caso del PDeCAT, que votará a favor a pesar de verse afectado por la actuación llevada a cabo presuntamente por el CNI, ya que la norma "afecta al bolsillo de los ciudadanos y las empresas".

Desde el PP, Jaime de Olano, ha dicho que el Gobierno "no es de fiar" y lo ha tildado de "incompetente". Y, aunque no ha desvelado el sentido final del voto de su grupo parlamentario, ha advertido que no apoyará el decreto por el mero hecho de que se tramite como proyecto de ley, pues si no admite ninguna de sus propuestas económicas, no será posible un acuerdo. No obstante, más tarde, fuentes parlamentarias del grupo conservador han confirmado su voto negativo.

Previamente, el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, el encargado de defender la propuesta del Gobierno para hacer frente a la crisis derivada del conflicto bélico, ha apelado a los partidos que aún habían dejado su dirección del voto en el aire, pidiendo expresamente apoyo al PP, lo que más tarde ha costado una reprimenda del portavoz de Unidas Podemos, Pablo Echenique.