Casado disimula acercarse al centro y aleja la posibilidad de un pacto de gobierno con Vox en Castilla y León

El líder del PP, Pablo Casado, ha alejado este martes la posibilidad de que su partido en Castilla y León llegue a un pacto de gobierno con Vox. Los conservadores se han quedado a diez escaños de la mayoría absoluta y necesitan a la extrema derecha para poder gobernar.

Así, Casado ha expresado su apoyo a Alfonso Fernández Mañueco para buscar un Gobierno "en solitario". Además, el líder del PP ha aprovechado para cargar contra Vox, criticando que la formación esté "más preocupada" por sustituir al PP que por cambiar al Ejecutivo de Pedro Sánchez.

Tras reivindicar el proyecto reformista de centroderecha que Casado dice representa el PP, ha afirmado que su formación no renunciará a sus principios en las negociaciones para formar gobierno. Así, no son negociables la igualdad, la cohesión territorial, la integridad autonómica y la integración en Europa, ha dicho en el Comité Ejecutivo Nacional de su partido, según recoge Efe.

Vox ya ha reclamado al PP entrar en el Gobierno y derogar al menos la ley de violencia de género autonómica y el decreto sobre Memoria Histórica para llegar a un acuerdo.

Casado ha evitado responder al reclamo de Sánchez de establecer un cordón sanitario contra Vox

El líder del PP no ha respondido al reclamo de Sánchez de establecer un cordón sanitario contra Vox siempre que el PP rompa con este partido sus acuerdos, pero ha cargado contra el presidente del Gobierno por estar preso "de la radicalidad de los herederos de ETA, los independentistas y los comunistas". Una crítica que ya es habitual.

Por último, Casado ha afirmado que el PP busca hacer del centroderecha "la piedra angular de una nueva etapa de reformas y progreso para todos los españoles" y ha rechazado "el bloque de ruptura que forman hoy los populismos a un lado y a otro". 

Vox, dispuesto a otras elecciones si no entra en el Gobierno

Vox, por su parte, ha aclarado que no va a ceder ni un milímetro en sus exigencias de entrar en el Gobierno de Castilla y León y va a llegar hasta el final, incluso si hay que repetir las elecciones en esta comunidad, y reclama tener el mismo peso que tenía Ciudadanos en el gabinete, ni más ni menos.

Fuentes de la dirección del partido han señalado a EFE que no tienen miedo a repetir los comicios aunque perdieran algún escaño y que ven al presidente en funciones de Castilla y León, Alfonso Fernández Mañueco, más proclive a llegar a un acuerdo con Vox que a Génova.