Los votos de PP, Ciudadanos y Vox certificaron este pasado martes de forma definitiva, en un Pleno extraordinario del Ayuntamiento de Madrid, la defunción de los Foros Locales, una de las principales herramientas de participación ciudadana que nació en la legislatura anterior, cuando Manuela Carmena era la alcaldesa de la ciudad. La oposición de Más Madrid y PSOE denuncia que este es el golpe definitivo, tras dos años de gobierno de la derecha, a uno de los proyectos estrella de Carmena: la implicación de los vecinos y vecinas de Madrid, a través de sus propuestas, en la cogobernanza de la capital.

El equipo de Gobierno encabezado por el actual alcalde, José Luis Martínez-Almeida, defiende justo lo contrario. Durante el Pleno, la concejala-delegada Coordinación Territorial, Silvia Saavedra, de Ciudadanos, afirmó que el alumbramiento de estos Consejos de Proximidad, cuyo reglamento se aprobó en el Pleno, son una apuesta por "un modelo de participación ciudadana neutral porque el anterior era una participación sectaria, un instrumento más de un partido político. Aquí proponemos un modelo organizado: ahora los vecinos y las asociaciones sólo podrán pronunciarse sobre aquello que afecte al ámbito territorial de los distritos".

La visión de Más Madrid no puede ser más opuesta. "Los Consejos de Proximidad suponen la culminación al asedio al que el Gobierno municipal ha tenido sometido a los Foros Locales durante dos años. Dos años en los que han invisibilizado, ignorado y despreciado a los cientos de personas que dedican parte de su tiempo a trabajar de forma solidaria y altruista por mejorar sus barrios y que constituyen el más valioso capital social de la ciudad", sostiene Carolina Pulido, concejala de la formación.

La representante de Más Madrid hace un repaso de las decisiones del equipo de Almeida para revertir el legado de Carmena en materia de participación ciudadana: "Esta decisión es el cerrojazo definitivo a la participación ciudadana. En solo dos años Madrid ha retrocedido décadas. Este es un paso más en la ofensiva para acabar con cualquier modelo de participación, una ofensiva que da continuidad a la eliminación de los presupuestos participativos y del Observatorio de la Ciudad; al uso instrumental que hace de la plataforma Decide Madrid, que ha sido convertida en una plataforma de propaganda a través de la cual se limitan a hacer marketing de sus políticas y al cierre de espacios comunitarios y ciudadanos".

Más Madrid considera que con estos Consejos de Proximidad se crea "un órgano controlado por el equipo de Gobierno". La formación denuncia, que a diferencia de los Foros Locales, la concejalía presidencia del distrito tiene voz y voto y ostenta, además, el voto de calidad, por lo que votará dos veces. Además, se crea la figura del organizador de mesa, que recaerá en un concejal vecino de los grupos políticos del equipo de Gobierno, lo que "recuerda a los comisarios políticos de tiempos más oscuros".

Pulido cree, además, que se ponen muchas trabas a los ciudadanos para participar en estos Consejos de Proximidad y poder presentar así sus propuestas. "Limitan y encorsetan la participación de los vecinos" al hacer desaparecer las sesiones plenarias con las que contaban los Foros Locales y reducir a sólo dos asociaciones, una vecinal y otra sectorial, la presencia de los vecinos por cada Consejo, uno en cada distrito. Tampoco hay posibilidad de crear más mesas de trabajo que las identificadas con las áreas de gobierno y se exigirá un triple informe de viabilidad técnica, jurídica y económica a los vecinos para presentar una propuesta, "algo que no se pide a los partidos".

El equipo de Almeida prefiere primar los aspectos técnicos y reglamentarios en su propuesta. El nuevo órgano contará con cuatro nuevas figuras. La primera será la de los organizadores de mesa, que corresponderá a los vocales vecinos de los grupos municipales que asumirán funciones de coordinadores internos. La segunda son los representantes de mesa, elegidos mediante votación por miembros de las mesas que se erigirán en sus representantes en el Consejo de Proximidad. La tercera es el asesor legal, que será un funcionario del distrito con formación jurídica. La última figura será la del consejero de proximidad, un portavoz de los representantes de mesa que colaborará con la presidencia en la coordinación del Consejo.

Además, se acota el número máximo de mesas y grupos de trabajo. De esta manera, en los Consejos de Proximidad habrá una mesa por cada área de gobierno municipal y en cada mesa sólo podrán existir simultáneamente dos grupos de trabajo de carácter temporal (dos meses prorrogables por otro más).

Cuando Aguirre los llamaba "los nuevos soviéts"

Los anteriores Foros Locales impulsados por el equipo de Manuela Carmena en 2017 fueron concebidos como un lugar de participación ciudadana para mejorar la ciudad y se basaban en un concepto más abierto de la participación, en una idea asamblearia, que no estaba limitada. Actuaban también como un espacio para la rendición de cuentas por parte de los concejales de distrito ante la ciudadanía. Sus decisiones no eran vinculantes aunque tenían un carácter referencial en los Plenos de las Juntas de distrito.

En su momento, la que entonces era portavoz del PP, Esperanza Aguirre, definió los Foros Locales como "los nuevos soviéts". El PP aseguraba entonces que debían ser "los representantes de los madrileños elegidos democráticamente" los que tomaran las decisiones y no "unos pocos vecinos". 

Unos argumentos repetidos al milímetro por Javier Ortega Smith, portavoz de Vox en el Ayuntamiento de Madrid, durante el Pleno del martes. Ortega Smith aplaudió la liquidación de los Foros Locales –"chiringuitos de la izquierda", los denominó–, y resaltó que la Constitución "habla de la participación de los españoles de forma directa o a través de sus representantes, no habla de una representación truncada que suponía un fraude a los representantes reales de los madrileños".

Ortega Smith presumió en el Pleno de que la eliminación de los Foros Locales respondía "al acuerdo de investidura" de Almeida que su formación cerró con el PP en 2019. En ese sentido, Más Madrid y PSOE denuncian que las palabras de Ortega Smith confirman que tanto Almeida como la vicealcaldesa, Begoña Villacís, actúan en este terreno al dictado de la ultraderecha para acabar con una política de participación ciudadana que fue concebida a imagen y semejanza de ciudades como París y Berlín y que en en 2018 fue reconocida con el Premio Servicio Público de la ONU por establecer "modelos de gobernanza más abiertos, transparentes, participativos e inclusivos".

La oposición sostiene que ahora se ha consumado el "deseado plan" de la derecha para acabar con la participación de los vecinos en la política municipal, que si bien nunca ha sido mayoritaria sí que representaba la apuesta por un modelo más inclusivo. Pero eso parece haberse acabado a tenor de las palabras que dijo en otro momento del Pleno Ortega Smith y que puede interpretarse como la puntilla: "Hoy es uno de esos días en lo que estamos orgullosos".