Armengol, sobre el 'caso Koldo': "No dejaré que mancillen mi nombre"
La presidenta del Congreso defiende su honorabilidad, explica cómo se llevó a cabo el proceso de compra de mascarillas y recuerda que nadie de su equipo aparece en el sumario.
Madrid--Actualizado a
La presidenta del Congreso, Francina Armengol, sale al paso de las informaciones que la han situado en las inmediaciones del 'caso Koldo' y, también, de la petición de dimisión que registró el Partido Popular (PP) en el Congreso. "No dejaré que mancillen mi nombre", ha aseverado Armengol, que ha explicado que su Gobierno sometió a inspección todos los materiales sanitarios recibidos y que, en el caso de las mascarillas que compró a la empresa vinculada a Koldo García, su equipo inició los procesos de reclamación "en tiempo y forma".
Sitúa, así, la pelota en el tejado de la popular Marga Prohens, actual presidenta de Balears, a quien pide explicaciones por no haber continuado, según explica Armengol, los trámites que su Gobierno empezó para reclamar parte del dinero pagado a la empresa Solución de gestión y apoyo a empresas, S.L. Es un proceso que, hoy por hoy, ya habría caducado, según una sentencia del Tribunal Supremo.
La presidenta del Congreso, que ha asegurado que ella empezó en política, en gran parte, para "luchar contra la corrupción", ha subrayado que los nombres que aparecen en el sumario del caso no son el suyo o los de integrantes de su Gobierno, sino, tal y como ha sugerido, algunos del PP. "El que me pide la dimisión es el que sale en el sumario".
También ha negado cualquier contacto directo con Ábalos sobre el asunto —"A mí y a mi Gobierno nadie nos dio una orden ni nos presionó"— y ha relatado cómo durante los meses más duros de la pandemia se producían innumerables contactos con empresas suministradoras de material y que se derivaban directamente al Servei de Salut d'Illes Balears. En este punto, todavía es una incógnita quién se puso en contacto desde el Ministerio de Fomento con el Govern para proponer la empresa vinculada a Koldo García.
En cuanto al hecho de que el equipo de Armengol en Balears tardara unos tres años en iniciar el proceso de reclamación, la presidenta de la Cámara Baja lo justifica con la gran cantidad de trabajo que se acumulaba durante la pandemia en el Servei de Salut d'Illes Balears y remarca que se hizo en el tiempo que marca la ley. Además, recuerda que ella ofreció "muchas veces" a Marga Prohens hacer "un traspaso", algo que la popular habría declinado. En cualquier caso, el equipo de Armengol habría dejado constancia de los trámites de reclamación.
"El PP ha roto todas las líneas rojas"
Durante su comparecencia, la presidenta del Congreso, que es la tercera autoridad del Estado, ha tratado de guardar un difícil equilibrio entre responder a las acusaciones del PP y, por otro lado, mantener la responsabilidad institucional que requiere su cargo, que se fundamenta en la neutralidad que debe asegurar a todos los grupos parlamentarios. De todas formas, ha acusado a la formación que dirige Alberto Núñez Feijóo de romper "todas las líneas rojas y todas las fronteras", en referencia a la petición de dimisión.
La comparecencia de Armengol llega el día después de que la Fiscalía Europea haya abierto una investigación sobre los contratos firmados tanto por el Servei de Salut d'Illes Balears, como por el canario durante la primera etapa de la pandemia para el suministro de mascarillas en relación al 'caso Koldo'.
Tellado insiste en la dimisión de Armengol
El portavoz del Partido Popular en el Congreso de los Diputados, Miguel Tellado, ha comparecido en la Cámara después de Armengol para reiterar la posición de su formación, que quiere que la presidenta del Congreso dimita. El popular ha puesto sobre la mesa, precisamente, el proceso de investigación iniciado por parte de la Fiscalía Europea y ha recordado que algunos otros presidentes socialistas rechazaron las mascarillas que ofrecía la empresa vinculada a Koldo García.
Preguntado por la caducidad del proceso de reclamación, el portavoz ha explicado que, según la información que tiene el partido, el trámite no habría vencido todavía. Sin embargo, una sentencia del Tribunal Supremo sí lo dio por caducado. El Govern balear, por su parte, entiende que el expediente no caduca a los seis meses, sino a los ocho.
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