Entrevista a Conchi Abellán"Ahora mismo no hay un respeto de Catalunya en Comú a Podem"
Barcelona-Actualizado a
Coordinadora autonómica de Podem en Catalunya desde junio de 2020, Conchi Abellán (1984) aspira a revalidar el cargo en las primarias que la formación celebrará en un par de semanas, a las que concurre al frente de la candidatura Con todo y para todas, Podem. Diputada en el Parlament durante la pasada legislatura y también integrante de la ejecutiva estatal del partido, cuenta con el apoyo de las exministras Ione Belarra e Irene Montero. Parte como favorita en un proceso que la enfrentará a María Pozuelo, secretaria de Organización de Podem, y cuyos resultados se conocerán el 2 de febrero.
Entrevistamos a la que ya es la líder más longeva de la convulsa historia del partido morado en Catalunya, que marca distancias con los Comuns, a quienes exige "respeto" y el cumplimiento de una serie de condiciones para prolongar la marca En Comú Podem. Abellán no cierra en ningún caso la puerta a explorar otras alianzas electorales y expone las claves de su proyecto político, que pretende aumentar la incidencia de Podem. Hablamos con ella también de la situación interna del partido y de su opinión sobre ERC y el Govern.
Hace tres años y medio que es la líder de Podem en Catalunya y se presenta a la reelección como coordinadora autonómica. ¿Cuáles son los objetivos de su candidatura?
El primero es que ahora mismo toca defender a Podem y reforzarlo. Somos conscientes de que en estos tres años y medio ha habido fallos orgánicos y lo que hacemos es plantear una nueva figura organizativa: los consejos de coordinación comarcales, que se sumarán a los consejos provinciales y nos van a permitir tener una mejor relación con la militancia y los círculos. También vamos a generar lo que llamamos un banco de talento, que es un espacio de voluntariado para gente que quiera participar de manera activa más allá de su círculo.
"Queremos tener más incidencia política y más capacidad orgánica para seguir trabajando"
Además, queremos tener un perfil mucho más político que hasta ahora. En Catalunya somos la única fuerza política que defiende de verdad los servicios públicos, que tiene claro que no se vende a nadie, ni va a votar a la derecha en función de intereses partidistas, electorales o de banderas. Vamos a defender hasta el final que queremos unos servicios públicos que no sean degradados como lo han sido hasta ahora, estamos totalmente en contra de la colaboración público-privada. Y no queremos trabajar solo con los colectivos sociales, sino abrirles la institución para que sean ellos mismos los que tengan voz. Queremos tener más incidencia política y más capacidad orgánica para seguir trabajando.
Podem no tiene ni una década de vida y en Catalunya suma ya cinco líderes. ¿Qué ha fallado para que no se haya consolidado a nivel de incidencia social e implantación territorial?
Yo llevo desde el inicio y vengo de círculos, soy casi una anomalía. Inicialmente hubo un boom, por la desafección política y la acumulación de indignación, y nos vino de todo, con mucha gente que no tenía ni ideología, sino un cabreo por lo que estaba sucediendo. Cuando te vas estructurando hay una contradicción entre partido-movimiento y partido y al final nos constituimos como una máquina de guerra electoral por la situación que se dio y por los ataques masivos que sufrimos de otros partidos y también de los medios de comunicación, criminalizando a Podemos por todo. Mucha gente se fue, aunque creyera en nosotros.
También se suma la inestabilidad de tener sucesivos dirigentes políticos y que cada uno diga una cosa diferente. Por ejemplo, Albano Dante [Fachin, secretario general de Podem entre julio de 2016 y noviembre de 2017] nos planteaba directamente irnos con Junts y ERC a hacer un acuerdo de coalición, que era algo intragable, porque no somos independentistas, somos democráticos. No era viable y eso hizo también que mucha gente se fuera. En estos tres años y medio hemos conseguido volver a atraer a gente para que participe en el partido, hemos logrado activar círculos y aumentar la militancia, tanto por tener la misma línea política como por asentar el propio partido.
Ahora mismo, ¿cuántos militantes tiene Podem en Catalunya?
Que paguen cuota son unos 1.200, mientras que hace tres años y medio era unos 800 y algo. Hay una tendencia al alza.
La relación con Catalunya en Comú es uno de los elementos claves de la asamblea ciudadana del partido. ¿Cómo quiere que sea esta relación?
La relación tiene que ser con respeto a la propia organización, con respeto al votante de Podemos y con respeto a la militancia que levanta este partido y este proyecto. Lo que queremos es que nos tomen en serio, no somos un espacio subalterno a ellos, sino que somos un espacio igual de representativo. Queremos ese respeto.
¿Ahora no existe?
Por desgracia, ahora mismo no hay un respeto a nuestra organización, cuando hemos trabajado mucho para construir relaciones y en tres años y medio hemos hecho una apuesta clara de unidad, que ahora mismo ya no me creo. Porque la unidad se la puede creer una parte, pero si la otra no lo hace o quiere una unidad teniéndote a ti como subalterna, entonces ya no es unidad, es imposición. No hay que cerrarse en banda y sigo tendiendo la mano a todo el mundo. Tenemos diferencias políticas en temas como el feminismo, la cuestión nacional, en cómo tiene que ser la gestión de los servicios públicos... Hay que sentarse, ponerlas encima de la mesa, hablar y llegar a unos acuerdos. Si, por ejemplo, tenemos una negociación de presupuestos en el Parlament esto no puede ir separado de lo que piensa y dice Podem.
Hasta las elecciones municipales de mayo pasado se hacía una reunión semanal de coordinación con Catalunya en Comú, pero a partir de entonces terminan. ¿Es así?
"Queremos que los Comuns nos tomen en serio, no somos un espacio subalterno a ellos"
Sí. También las hacíamos cada semana por la situación del momento, con las negociaciones de las municipales, pero no eran reuniones de análisis político y estrategia conjunta, sino que eran de cara a las elecciones, de cómo acompañar a los municipios y cómo afrontar la campaña. Pero ya existían carencias anteriores. Llevo dos años reclamando un espacio donde tengamos un debate político sobre nuestra estrategia y como votamos con los representantes públicos y las dos organizaciones y siempre dicen que se hará, pero no se ha conseguido hacer. Y creo que los grupos parlamentarios no pueden ir al margen de los partidos, tenemos que ir mano a mano. Este debate se tiene que dar y es urgente, y que no se haya dado también es una falta de respeto a la organización.
Usted misma ha manifestado que tiene una muy buena relación con Jéssica Albiach, líder de En Comú Podem en el Parlament y coordinadora nacional de Catalunya en Comú, que dejó recientemente la militancia en Podem. ¿No es así con otros dirigentes del espacio?
Ni buena ni mala, son representantes de otra formación política con los que hablo cuando tengo hablar y nos cabremos cuando nos tenemos que cabrear. Con Jéssica he tenido más relación porque la conozco desde 2014, he trabajado con ella en el Parlament cuando era diputada y aunque hemos tenido diferencias políticas en algún momento, nos hemos sentado, hemos hablado y hemos llegado a consensos. Y con ella ha sido muy fácil.
¿Si su candidatura se impone en la asamblea ciudadana, una de las prioridades será trabajar para presentarse conjuntamente a Catalunya en Comú en las futuras elecciones al Parlament o se tienen que dar determinadas condiciones?
"Se tienen que dar determinadas condiciones para que nos presentemos con los Comuns a las elecciones al Parlament"
Se tienen que dar las condiciones, que son respeto a la organización, que no haya vetos en las listas y que haya una representación real de nuestro espacio en ellas. Que crean que Podem solo merece un espacio de salida es una falta de respeto al votante de Podem. Vamos a ver qué pasa con las europeas, si vamos conjuntamente o no, y si no vamos juntos pues veremos qué gente apoya a Podemos en Catalunya y quizás nos aclare a todos cuál es el peso real de cada organización.
Por lo tanto, ¿no se puede descartar que Podem concurra en solitario al Parlament?
Yo no descarto nada y, además, en el propio documento político y organizativo lo dejo muy claro. Ya no nos vamos a cerrar en un "vamos a ir como En Comú Podem" como la otra vez, porque ahora ya no me creo la unidad, aunque sí que creo en alianzas, en función de si nos respetan o no nos respetan. No vamos a cometer el mismo error de encorsetarnos a una sola organización, que desde el principio además no ha permitido tener autonomía propia a Podem.
"Llegaremos a acuerdos si se respeta a Podem, que es una organización política propia con autonomía y capacidad de decidir"
Llegaremos a acuerdos si se respeta a Podem, que es una organización política propia con autonomía y capacidad de decidir y que esto se vea reflejado también en la representación de las listas políticas, para que podamos incidir y trasladar las demandas de la calle. Si eso no se da y nos hacen una propuesta como la que se ha dado en Galicia, que es totalmente subalterna y no respeta a la organización, pues lo consultaremos a las bases para que decidan si quieren ir con esa fuerza política. Y si es que no, trabajaremos alianzas con otras fuerzas.
¿Cómo por ejemplo?
Hay otras fuerzas que no tienen que ser Comuns, ERC o PSC. En Catalunya están los Comunistes, los Pirates, Recortes Cero... Hay muchas fuerzas progresistas y de izquierdas que siempre han quedado menospreciadas. No hablamos solo de alianzas con partidos, creo que también deben abrirse a colectivos sociales.
Las diferencias con Catalunya en Comú no surgen de golpe, pero no sé si se intensifican a raíz de la ruptura estatal entre Podemos y Sumar. Lo digo porque en las municipales se logró articular una unidad en las candidaturas de todo el espacio de En Comú Podem que no se había dado en 2019.
En parte sí, pero es una parte minoritaria. Aquí sí que le echo la culpa a los Comuns, porque se ha posicionado muy abiertamente y de forma contundente con una sola fuerza política y esto es un error. No puedes usar En Comú Podem para posicionarte solo con Sumar, hazlo como Catalunya en Comú. Si te vas a posicionar con En Comú Podem, que sea consensuado. Entras en las redes de En Comú Podem y casi solo ves a Yolanda [Díaz]. Que Sumar decida dejarnos fuera de todo en el Congreso, es decir, que no tengamos portavocías y ni siquiera una firma para poder presentar propuestas políticas, ya dice que en realidad no quieren que estemos.
"Al final son los Comuns quienes nos están empujando a romper"
Si nuestras diputadas deciden marcharse al Grupo Mixto, ¿por qué sale En Comú Podem pidiendo el acta de Lilith Verstrynge? Hazlo como Catalunya en Comú, porque nosotras no queremos que la entregue. Esto genera mucha más tensión. Están utilizando ese espacio comunitario sin consultarlo con Podem. Hemos puesto reiteradas quejas por eso, pero han seguido haciéndolo igual y ya veremos cómo lo terminamos de afrontar. Dependerá de ellos si al final continuamos estableciendo una buena organización o lo rompemos todo, porque al final quienes nos están empujando a romper son ellos, están en la misma línea de Sumar con Podemos. Si no puedo hacer política, me dejas fuera de todos los espacios de decisión y de los de representación, no esperes que me quede callada.
Escuchándola, parece claro que está más cerca de la ruptura que de otra cosa.
Tal como se están comportando, actualmente sí. Entiendo que dependerá de ellos, yo no me niego a ir juntos, pero si no se respetan unos mínimos acuerdos me lo ponen difícil. Igual que nosotras tenemos que ceder y lo hemos hecho mucho en pro de la unidad y en beneficio de la ciudadanía, ahora les toca hacerlo a ellos.
Estamos en un momento de división de las izquierdas. Si ponemos una mirada amplia es obvio que estás divisiones penalizan electoralmente y también alimentan la desafección política. ¿Falta generosidad por parte de todos?
Sí, estoy totalmente de acuerdo, y por eso estamos como estamos en Podemos. Más generosidad de la que ha tenido Podemos no la ha tenido nadie. Veníamos de unas elecciones en las que Podemos tenía 69 diputados e Izquierda Unida dos, y poco después hubo un acuerdo con IU y pasaron de tener dos diputados a dos ministros. Podemos ha sido capaz de tender la mano a Izquierda Unida, tendió la mano también para que los Comuns tuvieran un ministro, ha hecho campaña masiva en Catalunya dándoles apoyo a sus candidatos... No nos pueden decir que no nos hemos dejado la piel por la unidad.
Esta semana ya se ha visualizado el impacto de la ruptura entre Podemos y Sumar, con el voto contrario al decreto sobre los subsidios por desempleo. ¿Es un aviso al PSOE de que tendrá que negociar con Podemos?
Tendrá que negociar con Podemos, pero además se tiene que entender que no vamos a avalar ningún recorte, no lo hemos hecho nunca. Recortar y hacer un decreto que va a perjudicar a la gente más vulnerable implica que no van a contar con nuestro voto. Hasta el último segundo estuvimos intentando llegar a un acuerdo para votar a favor del decreto, porque también tenía cosas buenas, pero no se quiso quitar ese punto en ningún momento. Incluso delegaron en el PSOE para que negociara con nosotros una medida que venía del Ministerio de Trabajo, y eso ya dice si querían o no negociar.
¿Es posible que se articule una especie de polo de izquierdas en el Congreso con Podemos, ERC, Bildu y el BNG?
Siempre hemos tenido las alianzas muy claras, pero la mayoría parlamentaria no es la que era. En la anterior legislatura era progresista y actualmente es una mayoría democrática, pero no de izquierdas. Y tener cinco diputados que marquen también esa hoja de ruta social es imprescindible ahora mismo.
¿Qué relación mantienen con ERC? Porque elogia a Gabriel Rufián, pero a la vez es muy crítica con las políticas del Govern de Aragonès.
Sí, porque son caracteres diferentes. Muchas veces me gusta lo que dice Rufián y tiene un discurso de izquierdas, pero otra cosa es lo que pasa en Catalunya. ERC lleva poco tiempo gobernando sola, pero junto a Junts lleva mucho más tiempo. Ha tenido capacidad de incidencia para poder hacer políticas de izquierdas y progresistas y no las ha hecho. Ahora mismo la dinámica parlamentaria es complicada, con solo 33 diputados, eso lo entiendo, pero tampoco tiende la mano a las fuerzas progresistas para que las cosas vayan bien.
"ERC ha tenido capacidad de incidencia para hacer políticas de izquierdas y progresistas y no las ha hecho"
En muchos aspectos seguimos teniendo políticas de Pujol que no se han revertido. Esta misma legislatura hemos visto cómo consellers defendían el modelo público-concertado, vemos una dejación de funciones por parte del conseller de Salut, que no está teniendo una relación real con los colectivos que están todavía en huelga, como enfermeras y técnicos sanitarios, que reclaman una igualdad de condiciones. También podemos hablar de los bomberos voluntarios, que siguen sin cotizar a la Seguridad Social, o que sigan existiendo barracones en muchas escuelas mientras se sigue dando dinero a las concertadas.
En noviembre se expedientó a 13 dirigentes de Podem que en un comunicado habían defendido la unidad con Sumar cuando se estaba negociando la candidatura para las generales. ¿En qué situación se encuentra el proceso?
Están suspendidos de militancia durante nueve meses y no se pueden presentar a ningún cargo público ni orgánico durante cuatro años.
Esto significa que Yolanda López, la única diputada de Podem en el Parlament, está suspendida como militante.
Sí, durante nueve meses. Pero el cargo público lo asumió como Podem. No puede votar en el círculo o en la asamblea, pero todavía depende de Podem.
¿Se sienten representados por ella?
Necesitamos sentirnos representados por ella.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.