Este artículo se publicó hace 4 años.
Admitida a trámite la querella de Torrent y Maragall por presunto espionaje
Los dirigentes de ERC presentaron dicha querella el pasado 30 de julio contra el exdirector del Centro Nacional de Inteligencia Félix Roldan y la empresa israelí NSO por la presunta intercepción de comunicaciones.
El juzgado de instrucción número 32 de Barcelona ha admitido a trámite la querella presentada por el presidente del Parlament, Roger Torrent, y el diputado y líder de ERC en Barcelona, Ernest Maragall, por el presunto caso de espionaje a diversos dirigentes independentistas, según la presidencia de la Cámara catalana.
Torrent y Maragall presentaron dicha querella el pasado 30 de julio contra el exdirector del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) Félix Roldan y la empresa israelí NSO Group por la presunta intercepción de comunicaciones y "espionaje informático".
En la querella que presentaron en los juzgados de Barcelona, los dos dirigentes de ERC pedían tomar declaración a Roldán, director del CNI cuando se produjo el supuesto espionaje, y a los responsables de NSO Group, para tratar de clarificar los hechos y posibles delitos.
Los dirigentes de ERC apuntaban a un "espionaje político vinculado a los servicios de inteligencia estatales", habida cuenta, razonan, de que "no hay elementos para pensar que NSO sirva sus productos a otros organismos que no sean inteligencia o policiales".
Los presuntos ataques informáticos en los teléfonos de Torrent, Maragall y de la exdiputada de la CUP Anna Gabriel se realizaron a través del programa Pegasus, un sistema que solo está al alcance de policías y sistemas de inteligencia de gobiernos estatales.
Este programa espía, desarrollado por NSO y que solo se vende a gobiernos Fuerzas y Cuerpos de Seguridad, atacó al teléfono móvil de Maragall en 2019 utilizando un fallo de seguridad de WhatsApp que abrió la puerta a su instalación en el teléfono de Torrent y de 1.400 móviles en el mundo.
Los hechos denunciados se produjeron entre el 29 de abril y 10 de mayo de 2019, fechas previas a las elecciones municipales, a las que Maragall concurrió como candidato de ERC a la alcaldía de Barcelona. Según la demanda, Torrent y Maragall participaron en ese tiempo en reuniones de partido para preparar la campaña electoral, encuentros en el ámbito de la actividad parlamentaria y tuvieron contactos con entidades de diversa índole, así como conversaciones con periodistas.
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