La Fiscalía ha ratificado este jueves en sus conclusiones finales su solicitud de una pena de cinco años de prisión para el cantaor flamenco Diego El Cigala, quien ha sido juzgado en Jerez de la Frontera (Cádiz) por malos tratos hacia su expareja, Dolores Ruiz Méndez, conocida como Kina Méndez.

En su informe final, durante el juicio de más de cinco horas celebrado en el Juzgado de lo Penal número 3 de Jerez, la fiscal ha señalado que la principal evidencia en este caso ha sido el testimonio de la víctima, al que ha calificado de "firme, persistente, sin contradicciones y coherente".

La fiscal ha sentenciado que "el hecho de que fuera celosa no justifica un episodio de agresión posterior cuando ella cree que su marido la estaba engañando con otra persona", en referencia a uno de los episodios de maltrato por los cuales ha solicitado una sentencia condenatoria, rechazando la versión del acusado. 

Detenido hace tres años

En junio de 2021, Diego El Cigala fue arrestado en un hotel de Madrid. Su entonces pareja, Kina Méndez, presentó una denuncia en una comisaría de Jerez de la Frontera, acusándolo de causarle daños tanto físicos como psicológicos durante su relación.

El cantaor flamenco fue detenido tras un requerimiento de la Policía de Jerez y pasó una noche en comisaría antes de ser puesto en libertad a la espera de que el juzgado avanzara en las diligencias del caso. En julio de 2023, el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Jerez propuso que fuera procesado por los cargos mencionados.

El proceso continuó en el juzgado de Jerez, donde la jueza emitió un auto de procedimiento abreviado, dando por concluida la investigación y proponiendo que El Cigala fuera juzgado por los delitos mencionados.

No es la primera vez que el cantaor flamenco se enfrenta a problemas legales. En 2014, fue condenado por el Juzgado de Instrucción número 12 de Madrid por amenazar a una azafata, y se le impuso el pago de una multa durante 20 días a razón de seis euros diarios, además de 245 euros por los días que ella estuvo incapacitada para trabajar, 1.200 euros por las secuelas sufridas y 2.520 euros por los gastos médicos.