Cuba excarcela a un preso político enfermo y acerca a casa a otros seis

El Gobierno de Cuba comunica  a la Iglesia Católica que otorgará licencia "extrapenal" al considerado preso de conciencia Ariel Sigler, de 47 años, cuyo estado de salud es muy grave. Además, el Gobierno cubano acercará a otros seis reclusos a centros penitenciarios de sus provincias.

Sigler está siendo trasladado este sábado a su casa en la provincia de Matanzas, según informaron fuentes familiares.

En conversación telefónica, Juan Francisco Sigler, hermano del prisionero, confirmó que tras recibir la licencia extrapenal, Ariel ha abandonado esta mañana el hospital de La Habana donde estaba ingresado, para viajar, presumiblemente en ambulancia, a la localidad de Pedro Betancourt, su lugar de residencia, donde le espera su familia.

Los presos que serán trasladados a sus provincias de residencia son los disidentes Héctor Fernando Maceda, Juan Adolfo Fernández Sáinz, Omar Moisés Ruiz Hernández, Efrén Fernández Fernández, Jesús Mustafá Felipe y Juan Carlos Herrera Acosta, según informó el Arzobispado de La Habana en una nota de prensa.

Tanto Sigler como estos seis presos son miembros del llamado Grupo de los 75 disidentes encarcelados y condenados en la represión de la conocida como "Primavera Negra" de 2003.

Este anuncio supone el segundo paso del Gobierno de Raúl Castro sobre los prisioneros políticos tras el proceso de diálogo iniciado en mayo con la jerarquía de la Iglesia católica cubana y que incluye este asunto, entre otros.

Entre las primeras reacciones de la disidencia interna de la isla al conocerse la noticia figura la de la Comisión Cubana de Derechos Humanos y Reconciliación Nacional (CCDHRN) que criticó que el Gobierno "dosifique" y "alargue" las medidas sobre los presos.

El gesto se produce días antes de la reunión de la UE para  revisar la "posición común" hacia la isla

Elizardo Sánchez, portavoz de la CCDHRN, exigió la liberación incondicional de todos los presos políticos que hay en Cuba, unos 200 según esta comisión.

Por su parte, las Damas de Blanco expresaron su alegría por el anuncio de nuevas medidas en favor de presos políticos y volvieron a a agradecer a la Iglesia Católica su papel de mediación ante el Gobierno.

Algunos de los presos que serán "acercados" son esposos de este grupo de mujeres, como el caso de su líder Laura Pollán: su marido Héctor Maceda será trasladado de la prisión de Matanzas donde se encuentra a otro penal en La Habana.

Los nuevos movimientos de presos políticos se producen a pocos días de la reunión de la Unión Europea el próximo lunes para revisar la "posición común" hacia la isla, vigente desde 1996 y que condiciona las relaciones de Europa con Cuba a su apertura democrática. También está cerca la visita a Cuba del secretario del Vaticano para Relaciones con los Estados, Dominique Mamberti, que inaugurará el miércoles 16 en La Habana la X Semana Social de la Iglesia y que será recibido por el canciller Bruno Rodríguez.

El ex presidente de Cuba Fidel Castro considera "el odio del Estado de Israel contra los palestinos es tal, que no vacilarían en enviar al millón y medio de hombres, mujeres y niños de ese país a los crematorios en los que fueron exterminados por los nazis millones de judíos de todas las edades", señala Castro en su último artículo, titulado "El zarpazo al acecho".

Asegura que estas opiniones sobre Israel no nacen del odio sino "del sentimiento de un país que se solidarizó y prestó albergue a los judíos cuando en los días duros de la Segunda Guerra Mundial el gobierno pro yanki de Batista trató de enviar de regreso desde Cuba un buque cargado de ellos, que escapaban de Francia, Bélgica y Holanda a causa de la persecución nazi".

En su artículo Fidel Castro también se refiere a las nuevas sanciones a Irán impuestas por el Consejo de Seguridad de la ONU por el programa nuclear de Teherán y, además, afirma que "una etapa nueva y tenebrosa se abre para el mundo".

El líder cubano responsabiliza a Estados Unidos de la "aventurera idea" de crear en Israel, en la década de los 50 del siglo pasado, "un gendarme en el Medio Oriente que hoy amenaza a una parte considerable de la población mundial y es capaz de actuar con la independencia y el fanatismo que lo caracterizan".