La partida de ajedrez que libra la izquierda alternativa para las próximas elecciones generales está lejos de acabar. Pero uno de los movimientos clave de quien se arroga el papel de rey de ese tablero, Izquierda Unida, se sellará mañana. Su formulación es tan sencilla como compleja de llevar a cabo: la dirección de Cayo Lara vence sus cautelas iniciales y se decide ya a entablar una ronda de contactos con el resto de fuerzas progresistas para, con ellas, liderar si es posible una candidatura unitaria.

El compromiso figura en una resolución de dos páginas y de título kilométrico: Ante el próximo ciclo electoral: IU saluda el avance de las propuestas de convergencia política para refundar la izquierda. Un texto al que ha tenido acceso Público [descargar aquí la iniciativa] y que mañana defenderá su autor, Enrique Santiago, secretario de Refundación, en la reunión de la Presidencia Federal, órgano intermedio de dirección (57 miembros).

En su documento, IU manifiesta su “convencimiento y voluntad de intensificar los contactos” con ciudadanos y partidos que proponen la “convergencia frente a las políticas neoliberales”. “Para ello –remata el texto–, iniciaremos de inmediato una ronda de encuentros tanto con la ciudadanía como con el conjunto de colectivos sociales, sindicales, iniciativas, manifiestos y fuerzas políticas de izquierda y progreso interesadas en avanzar en la convergencia de la izquierda para una salida social de la crisis”. IU desea “concurrir” a las generales “con candidaturas que representen la máxima unidad de la izquierda plural y transformadora”.

Dialogará con Equo, ICV o los artistas e intelectuales del manifiesto 'Una ilusión compartida'

“Queremos vernos con todo el mundo para construir un acuerdo político amplio. No vamos a dejar fuera a nadie”, explica Santiago a este diario. ¿Y quiénes serán los interlocutores? Son básicamente tres los partidos estatales, contesta: Iniciativa per Catalunya Verds (ICV), Equo (la formación ecosocialista de Juan López de Uralde) e Izquierda Anticapitalista (IA). Avisa de que no se contemplan reuniones con Compromís (Valencia) o Iniciativa Verds (Balears), pues “corresponde a las federaciones de IU” tejer alianzas con formaciones autonómicas, como ya advirtió en su día Lara ante el Consejo Político Federal.

Fuera de los partidos, destacan tres iniciativas. La más temprana, las Mesas de Convergencia, un movimiento cívico impulsado en febrero por los profesores Juan Torres y Armando Fernández Steinko y el activista Carlos Martínez. Y hace una semana se presentó en Madrid el manifiesto Una ilusión compartida, promovido por juristas, intelectuales y artistas como Pedro Almodóvar, José Antonio Martín Pallín, Ana Belén, Miguel Bosé, Pilar Bardem o Luis García Montero. Ese día se lanzó otro llamamiento a favor de la regeneración democrática suscrito por docentes universitarios, encabezados por Juan Carlos Monedero y Pedro Chaves. Por lo pronto, IU se verá esta semana con los responsables de IA y de Una ilusión compartida.

La dirección avisa de que el acuerdo ha de hacerse 'en torno a IU y sobre un programa'

“No tengo miedo a hablar de bloques, alianzas o frentes. Lo importante es que el acuerdo se base en un programa. Pediremos las propuestas por escrito”, insiste Santiago. IU busca, añade, que “se posicione todo el mundo”, que todos los actores “muestren sus cartas” y digan si quieren o no la convergencia “en torno a IU”, preservando sus “siglas”. Ahí está una clave: la federación está “dispuesta a escuchar”, pero “no asumirá” que se cuestione el estatus de IU como “referencia de la izquierda alternativa”. “Que se retraten los demás. Por nosotros no quedará –agrega Miguel Reneses, secretario de Organización–. IU es el referente sólido y necesario para la reconstrucción de la izquierda. Todo lo demás es una quimera”. 'El nuestro es un proyecto a largo plazo. Quien sólo persiga el escaño, que lo diga. Es llamativo que surjan proyectos sin propuestas detrás. La convergencia debe hacerse en torno a la propuesta, no en base a famosos y personajes, porque estos suben y bajan con rapidez', previene Santiago. 

La dirección de Lara sabe de la dificultad del acercamiento a otros partidos que recelan de IU. Es el caso de Equo, que ya el pasado enero descartó una alianza. “Con los intelectuales sí hay buena sintonía”, opone el responsable federal de Refundación. Marga Ferré, secretaria de Programa, confía en que “la potente ofensiva neoliberal” llene de “sentido común a todo el mundo”, aunque insiste en que lo importante es la confluencia en torno al 'programa'. 'Nosotros tenemos líneas básicas, rojas', apuntala. 

La resolución de la Presidencia Federal se aproxima a la idea de “frentes amplios de la izquierda” que defienden Gaspar Llamazares y su grupo, IU Abierta. “Es un punto en positivo para avanzar. Pero debemos dirigirnos a las demás izquierdas de igual a igual, con humildad, sin prepotencia, sin soberbia, porque mucha gente no se fía de IU. La pelota es´ta en nuestro tejado. Es tal vez la última oportunidad para refundar la izquierda. Nos jugamos quedarnos en la marginalidad o sobrevivir”, alega el gasparista Antonio Cortés, quien considera que el paso dado por la dirección, tras las reticencias iniciales, responde al 'revulsivo' que ha supuesto el manifiesto Una ilusión compartida.

Lara, virtual aspirante // La Presidencia Federal, que seguramente sufrirá la contaminación del conflicto con IU Extremadura, propondrá a Cayo Lara como candidato a las generales. Sin embargo, si en el próximo Consejo Político, previsto para el 23 de julio, surgen otros rivales, se convocarían primarias.

Abierto a la ciudadanía //Mañana se lanzará la convocatoria social para la redacción del programa, abierta a la participación ciudadana. La convergencia política es la tercera pata. “No es un giro en nuestra estrategia. Continúa con el trabajo de refundación que hemos venido haciendo estos años”, dice Santiago.