El Sabadell ha competado la transferencia a Cerberus del control sobre varias carteras inmobiliarias con un valor bruto contable conjunto de aproximadamente 6.414 millones de euros y con cerca de 46.000 unidades o activos.

Son los portfolios de las carteras Coliseum, Challenger y Rex cuyos acuerdos fue cerrando entre julio del pasado año y agosto de 2019, según la información aportada por el banco este viernes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).

Su cuantía está ajustada sobre el acuerdo inicial porque durante ese tiempo ha ido enajenando vendiendo activos a terceros. La transferencia la ha formalizado, tal y como detalló en su día con la venta en bloque a una filial de Cerberus Capital Management que estará controlada en un 80% por Cerberus y el 20% restante por Sabadell.

Al margen de esta operación queda aún pendiente la transmisión de otra cartera con alrededor de 15.000 unidades o activos inmobiliarios, con un valor bruto de 1.817 millones, al estar pendiente el potencial ejercicio de tanteo por parte de terceros.

El Sabadell aclaró que no alterará los impactos financieros, siendo uno de ellos el precio de las operaciones fijado en alrededor de 3.430 millones de euros.

La transferencia obligará al banco a efectuar una dotación o provisión adicional de 52 millones de euros netos de impuestos, y obligará a contabilizar otros 20 millones en impuestos en las cuentas del cuarto trimestre por costes en los activos.

Confía que la operación a su término contribuya positivamente a mejorar la rentabilidad del grupo Sabadell y sume 16 puntos básicos en el cuarto trimestre en el ratio de capital de máxima calidad CET1. Teniendo en cuenta dicho impacto, el CET1 proforma se situaba al cerrar septiembre en el 11,78%.