Corporación Financiera Alba ha salido definitivamente del capital social de ACS, al vender la participación del 2,55% que le quedaba en la compañía por un importe de 270 millones de euros.

La última transacción de títulos del grupo que preside Florentino Pérez ha reportado unas plusvalías brutas de 137,5 millones al holding inversor de la familia March, según revela en su informe de resultados trimestrales.

Con esta operación, Alba abandona definitivamente el capital social de ACS, grupo de construcción y servicios del que ha sido socio fundador e histórico, y en el que llegó a ser primer accionista con una participación de más del 20% entre los años 2006 y 2009. Desde esas fechas, la firma de los March ha venido reduciendo paulatinamente su posición en el grupo constructor, que culmina ahora después de que ya en el verano de 2016 saliera del consejo, donde contaba con dos puestos.

La salida del que fuera primer accionista de ACS ha coincidido con la de otro socio de referencia, el empresario balear y dueño de Iberostar Miguel Fluxá, quien el pasado mes de abril dejó la compañía mediante la colocación acelerada del 5,6% que tenía en el grupo.

En el caso de los March, desde el comienzo del ejercicio han vendido en distintas operaciones títulos de ACS representativos del 7,54% de su capital, por un total de 743 millones de euros, lo que les ha generado plusvalías de 350 millones, según detallan en la presentación de resultados trimestrales de Corporación Financiera Alba.

De esta forma, la compañía de construcción y servicios queda con dos últimos socios de referencia, su presidente, que tiene un 12,5% de la compañía, y los empresarios Alberto Cortina y Alberto Alcocer, que suman un 6,3%.

El cambio accionarial tiene lugar mientras ACS aborda una nueva etapa con la designación de Marcelino Fernández Verdes como consejero delegado y futuro sucesor de Florentino Pérez al frente del grupo.

Asimismo, se registra en tanto la compañía acaba de ratificar su estrategia de crecimiento y reforzamiento de la expansión internacional, para la que asegura contar con una "notable capacidad de inversión". De hecho, el grupo acaba de recibir una primera calificación crediticia de investment grade otorgada por Standard & Poor's (S&P).