Las prestaciones por desempleo se han endurecido bajo el Gobierno de Rajoy. Desde que el líder conservador llegó a la Moncloa hasta su cese, el pasado viernes tras prosperar la moción de censura registrada por el PSOE, la protección a los parados ha caído en un 13,15%, es decir, más de diez puntos.

En este sentido, la tasa de cobertura (el porcentaje de parados con algún tipo de protección) ha bajado del 66,2% —diciembre de 2011— al 53,05% —abril de 2018—.

Por otro lado, pese al endurecimiento de las condiciones para poder cobrar el paro y el creciente número de desempleados que lo agotan al no encontrar trabajo —fruto de la reforma laboral de febrero de 2012—, los gastos totales de los servicios públicos de empleo (antiguo Inem) en estas prestaciones ascendieron a 1.399,5 millones de euros el pasado mes de abril, un 0,8% más que en igual mes de 2017, según los datos difundidos este lunes por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social en funciones.

El gasto medio mensual por beneficiario, incluidas las cotizaciones a la Seguridad Social y excluyendo el subsidio agrario de Andalucía y Extremadura, se situó en 812,3 euros, lo que supone un aumento de 24,6 euros (+3,1%) sobre el mismo mes del año 2017.

La cuantía media bruta de la prestación contributiva percibida por beneficiario alcanzó en abril los 808,8 euros, con un aumento de 5,5 euros sobre el mismo mes del año anterior (+0,7%).

Los datos de prestaciones siempre van con un mes de retraso respecto a las cifras de paro. Por eso, Empleo ha publicado este lunes las cifras del gasto en desempleo de abril y los datos de paro de mayo.

El número de solicitudes de prestaciones ascendió el pasado abril a 556.175, lo que representa un aumento del 14,8% respecto a igual mes de 2017.

De acuerdo con los datos del Ministerio, en el cuarto mes del año se tramitaron en total 518.972 altas, un 12% más que en abril de 2017. El plazo medio de reconocimiento de la prestación fue de 1,1 días.