El Barcelona ya ha puesto el pie en tierras japonesas sin tiempo casi de asimilar la victoria cosechada en el Santiago Bernabéu. Ahora el reto es volver a conquistar el Mundial de clubes y ya se han puesto manos a la obra.

La plantilla azulgrana ya ha realizado su primer entrenamiento en Yokohama tras tras ser recibidos de madrugada en el aeropuerto de Narita, a las afueras de Tokio, por cerca de un centenar de entusiastas aficionados nipones con los colores del equipo.

A primera hora los 27 jugadores y el entrenador del equipo, Josep Guardiola, asistieron a la sesión de fotos del evento y a una charla técnica del instructor de árbitros de la FIFA, Steve Bennett, con el que hablaron y analizaron vídeos sobre el reglamento del torneo.

A mediodía, el Barcelona acudió al campo de entrenamiento del equipo local Yokohama Marinos, en el que le esperaban casi un centenar de medios internacionales y numerosos aficionados que estaban a las puertas y curiosos que se asomaban desde los edificios colindantes.

Guardiola programó un entrenamiento muy suave de cerca de una hora para ir cogiendo ritmo de cara al partido de semifinales que disputará el jueves ante el Al Sadd qatarí, que se deshizo ayer del Esperance tunecino en los cuartos de final del torneo por 2-1.

Después fue el turno de palabra para el técnico y el capitán del Barça. Guardiola, siempre comedido, afirmó que su equipo no puede considerarse 'el mejor del mundo' hasta que no logren alzarse con el título en Japón e instó a sus jugadores a 'no perder la oportunidad de ganar' el torneo, ya que se trata de un título 'muy prestigioso y muy importante' que 'llega muy pocas veces'.

Para el entrenador del Barça, 'el deseo y las ganas de ser campeones del mundo' son suficiente motivación para preparar a sus futbolistas de cara al primer partido del torneo. Los jugadores 'son conscientes de que es una competición muy dura' y en la que 'puede haber muchas sorpresas', añadió Guardiola.

Para el entrenador ahora lo más importante es que sus jugadores se adapten al horario local (ocho horas más que en España), que disfruten del tiempo libre y que se preparen para los próximos partidos sin olvidar de que a lo que han venido es 'a ganar', dijo.

Como el partido del Bernabéu sigue estando reciente, Guardiola ha recordado que con el Real Madrid 'son líderes' y fue 'nombrado mejor equipo del siglo XX', con lo que a pesar de 'haber tenido la suerte de ganarles en los últimos partidos', considera que están 'muy cerca siempre el uno del otro'.

Carles Puyol considera, por su parte, que la victoria en el estadio madridista les hace llegar a Japón con 'mucha confianza'. El capitán azulgrana cree que hicieron 'muy buen partido' pese a 'empezar mal con el gol en contra', un momento clave en el que en lugar de venirse abajo, apostaron por 'seguir jugando' su fútbol 'desde atrás'.

Sin embargo, Puyol sabe que, pese a los elogios, el Mundialito 'siempre es difícil, venimos con muchísimas ganas e ilusión, conscientes de que nos lo van a poner muy complicado'.