Receta de té de jengibre y manzana

El té de jengibre es una de las infusiones más utilizadas cuando se tiene dolor de garganta, resfriado o problemas gástricos. Una infusión ligeramente picante que se elabora con esa raíz, originaria de Asia, y muy utilizada en la medicina tradicional china e india.

La infusión básica se prepara con agua caliente y varias rodajas de jengibre y limón. Se pueden incluir otros ingredientes, como semillas de cardamomo, o más frutas, como la manzana.

El té de jengibre tiene un ligero efecto estimulante, y es una forma ideal para beneficiarse de las propiedades antioxidantes y antiinflamatorias de esta planta. Puedes preparar más cantidad en una sola cocción para que sea más potente. La guardas en la nevera y la vas degustando, caliente o fría, día a día.

Prepara los ingredientes:

Pela el trozo de jengibre y córtalo en rodajas finas. Lava la manzana y córtala en rodajas o trozos pequeños (puedes dejar la piel, ya que aporta sabor). 

En una olla, calienta las 2 tazas de agua hasta que empiece a hervir.

Una vez que el agua esté hirviendo, agrega el jengibre, la manzana, el limón y el cardamomo. Deja que hiervan durante unos 5-10 minutos para que suelten sus esencias.

Después de hervir, cuela el té para eliminar los trozos de jengibre y manzana.

Añade miel o azúcar al gusto, si quieres un toque dulce.