Este artículo se publicó hace 5 años.

El juramentoNXIVM, la peligrosa secta que se disfrazaba de organización que empoderaba a sus miembros

Keith Raniere, en un dibujo durante el juicio. REUTERS
Keith Raniere, en un dibujo durante el juicio. REUTERS

Àngel Ferrero

Barcelona-

Publicidad
Publicidad
Publicidad

El lado oscuro de NXIVM

Publicidad
Publicidad

Más allá del sensacionalismo

Publicidad

Comentarios de nuestros suscriptores/as