Este artículo se publicó hace 16 años.
Tropas de Guinea intentan un golpe tras morir el presidente
Por Saliou Samb
Soldados amotinados de Guinea lanzaron un intento de golpe el martes en el país del oeste de África, horas después del anuncio de la muerte del presidente Lansana Conte, que llevaba más de dos décadas en el cargo, dijo un alto cargo.
"Hay un intento de golpe de estado", dijo el presidente de la Asamblea Nacional Aboubacar Sompare, quien bajo la Constitución debe asumir el cargo de jefe de Estado interino, al canal de televisión francés France 24.
"No creo que todo el Ejército esté detrás de los amotinados (...) Es un grupo", añadió, hablando desde su casa en la capital Conakry.
El intento de golpe se lanzó a pocas horas de que los líderes del Gobierno informaran de que Conte, que se cree tenía 74 años, había muerto tras casi un cuarto de siglo al frente del país, el mayor exportador del mundo de bauxita.
Sompare dijo que ya se habían iniciado negociaciones entre los oficiales y soldados golpistas, que previamente anunciaron la suspensión de la Constitución y del Gobierno en una emisión en la radio estatal, y los leales al mandato constitucional.
El presidente de la Asamblea Nacional dijo que creía que la mayoría del Ejército era "leal".
Francia, ex potencia colonial, dijo que se opondría a cualquier golpe de estado en Guinea. "No estaremos satisfechos con una situación que no respete el orden constitucional", dijo el portavoz del ministerio de Exteriores francés, Eric Chevallier, en una conferencia de prensa.
"Parece que las autoridades legítimas están actualmente en control de la situación en el país", dijo Chevallier.
Previamente, uno de los organizadores del golpe, el capitán Moussa David Camara, anunció en la radio estatal que asumía el cargo un autodenominado Consejo Nacional para la Democracia y el Desarrollo.
La emisión citó lo que calificó de corrupción generalizada, impunidad y anarquía y una "catastrófica situación económica" para justificar la disolución del Gobierno.
"Los miembros del actual Gobierno son en gran parte responsables de esta crisis social y económica sin precedentes", declaró.
El fallecimiento del general Conte, diabético y fumador empedernido, dejó un potencial vacío de poder en el país.
Guinea ha sufrido disturbios antigubernamentales, huelgas y sangrientos motines militares en los últimos años, agravados por la subida de los precios de los alimentos y de los combustibles. La mayor parte de la población es pobre, pese a las enormes riquezas minerales del país.
Cuando los líderes del Gobierno se reunieron para anunciar la muerte de Conte en la televisión estatal de madrugada, Sompare dijo que Conte había fallecido el lunes por la noche. El presidente de la Asamblea pidió al Tribunal Supremo que lo nombrara presidente en línea con la Constitución.
El artículo 34 de la Constitución de Guinea prevé que el presidente de la Asamblea Nacional asuma el cargo en caso de la muerte del jefe del Estado y organice elecciones presidenciales en 60 días. Los comicios legislativos ya estaban previstos para 2009.
Sompare declaró 40 días de duelo nacional.
(Información adicional de François Murphy en París y Humeyra Pamuk en Londres, escrito por Pascal Fletcher. Traducido por Blanca Rodríguez en la Redacción de Madrid. Reuters Messaging: blanca.rodríguez.reuters.com@thomsonreuters.net + 34 915858341; blanca.rodríguez@thomsonreuters.com))
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