"Tehilim", ética y religión desde la cotidianeidad de una familia judía

Cristina Ruiz.

Precedido de la etiqueta de "cine independiente" en la que enmarca su filmografía, el director francés Raphaël Nadjari presentaba en Madrid "Tehilim", una película en la que enfrenta al espectador a diversas cuestiones éticas, desde la cotidianeidad de una familia judía que pierde al cabeza de familia.

La rutina de una familia de Jerusalén se rompe cuando el padre desaparece sin razón alguna tras un accidente de tráfico. Sin pistas sobre su paradero, su padre, su esposa e hijos intentan sobrellevar la ausencia, unos aferrándose a la religión y otros centrándose en la parte más terrenal.

"Es un reflejo de mis propias inquietudes, una película de preguntas y simbolismos en la que no intento decir cuál es la verdad, sólo intento buscarla", comentaba el director.

Como ya hizo en su anterior trabajo, "Avanim", Nadjari centra su tesis sobre "la esperanza, la búsqueda de la verdad y la religión" en una comunidad judía y advertía de que "Tehilim" "no es la típica forma de contar historias".

"Si fuera una película estadounidense probablemente el padre hubiera aparecido al final, pero aquí no, no hay soluciones", advertía el realizador francés.

Y es que, durante una hora y media, la cinta se centra únicamente en el vacío que supone la pérdida de un ser querido, y la tensión que se produce entre los propios familiares cuando cada uno se cierra en sus opiniones.

Según comentaba Nadjari, una de las claves para dar forma a esta historia ha sido "la improvisación", por lo que durante los escasos 20 días que duró el rodaje potenció "el lado más espontáneo de los actores, que en algunos casos eran realmente rabinos o policías".

El filme -el quinto del cineasta francés- llegará a las pantallas españolas mañana, después de haberse proyectado en diversos festivales como el de Cannes, Sevilla, o el de Cine Independiente de Madrid. EFE