Sudán rectifica y dice que son 4 los secuestrados chinos muertos

El ministerio del Interior sudanés confirmó hoy que cuatro de los nueve trabajadores chinos, secuestrados el pasado 18 de octubre, murieron en un intercambio de disparos entre sus captores y las fuerzas gubernamentales.

El gobierno hizo este anuncio tres días después de que el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Sudán, Ali al Sadeq, señalara que eran cinco los muertos y que en ningún momento las fuerzas de seguridad sudanesas atacaron al grupo de captores.

El portavoz del Consejo de Ministros sudanés, Omar Mohamed Saleh, afirmó en una rueda de prensa posterior a una reunión que el titular de Interior, Ibrahim Mahmud Hamed, negó que los cuatro chinos, que trabajaban en el sector de petróleo en la región sureña de Kurdufán, fueran asesinados a sangre fría por sus captores.

Además, afirmó que murieron durante un tiroteo.

Según Hamed, otros tres secuestrados resultaron heridos, mientras que los otros dos restantes siguen todavía en paradero desconocido.

Por su parte, China envió hoy una delegación gubernamental, encabezada por el ministro de Asuntos Exteriores, Yang Jiechi, para lograr el rescate de los dos trabajadores que permanecen desaparecidos, anunció en una rueda de prensa en Pekín la portavoz de turno de la Cancillería, Jiang Yu.

El gobierno chino también confirmó hoy la muerte de cuatro de sus ciudadanos durante un intento de rescate del Gobierno sudanés, a pesar de que fuentes de la embajada china en la capital sudanesa sólo había informado de la recepción de tres cadáveres.

Desde el principio, la confusión ha reinado sobre la cifra real de fallecidos, según la fuente a la que se acudiera.

Las autoridades sudanesas han responsabilizado a una facción disidente del Movimiento para la Justicia e Igualdad, uno de los grupos rebeldes que lucha en la región de Darfur.

Los secuestrados eran empleados de la compañía estatal china de petróleo Sinopec.