Este artículo se publicó hace 14 años.
Rusia y China piden a Irán que acepte la propuesta de la ONU para evitar sanciones
Rusia y China pidieron hoy al Gobierno de Irán que acepte el plan de la ONU para resolver el conflicto sobre su programa nuclear y evitar así las nuevas sanciones que propugnan las potencias occidentales por la negativa iraní a detener el enriquecimiento de uranio.
El embajador ruso ante la ONU, Vitaly Churkin, expresó además el convencimiento de Moscú de que las diferencias con Teherán pueden resolverse mediante "el dialogo y la interacción con los iraníes".
"Creemos que todavía hay un horizonte para las negociaciones", aseguró el representante ruso durante su intervención en una reunión del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas.
Churkin instó a las autoridades iraníes a que acepten la propuesta del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA) de que el uranio para su reactores se enriquezca en Rusia y Francia, con lo que se garantizaría su uso para fines civiles.
Hasta el momento, Teherán ha rechazado el plan de la ONU y se niega a enviar el uranio de sus almacenes al exterior.
El embajador adjunto de China ante la ONU, Liu Zhenmin, también instó a encontrar una solución negociada que permita a Irán seguir con sus actividades nucleares libre de sospecha.
Al mismo tiempo, pidió a Teherán que mejore su colaboración con la OIEA y reiteró que Pekín sigue comprometida con la estrategia de combinar el diálogo con la adopción de medidas de presión contra la República Islámica.
Estados Unidos, Francia, Reino Unido y Alemania, que junto con China y Rusia conforman el llamado Grupo 5+1, son partidarios de castigar al régimen iraní con una cuarta ronda de sanciones para incentivarlo a aceptar la propuesta del organismo de la ONU.
Rusia parece abierta a adoptar nuevas medidas, pero China se ha mostrado hasta la fecha opuesta a recurrir a las sanciones pese al incumplimiento iraní de las resoluciones del Consejo de Seguridad.
Turquía, Líbano y Brasil, que son miembros no permanentes del Consejo de Seguridad, tampoco favorecen por el momento endurecer el régimen punitivo contra Irán.
Por su parte, el embajador del Reino Unido, Mark Lyall Grant, señaló que las sanciones son la mejor manera de asegurar una salida negociada a la situación y evitar "que otros resuelvan este asunto de otra manera", en referencia a la posibilidad de que Israel bombardee las instalaciones nucleares iraníes.
"Serán una prueba para el régimen de que el coste del programa nuclear sobrepasa sus supuestos beneficios", indicó el diplomático británico, para el que las sanciones "ofrecen la mayor posibilidad de atraer a Irán hacia unas negociaciones serias".
Asimismo, su homóloga estadounidense, Susan Rice, resaltó que la actitud de Teherán no deja otra opción más que seguir la vía de la presión.
"Ante el incumplimiento iraní de sus obligaciones, este Consejo debe considerar nuevas medidas que hagan al Gobierno de Irán atenerse a las consecuencias", agregó.
Estados Unidos ha enviado a los otros cuatro miembros permanentes del Consejo de Seguridad del organismo (Francia, Reino Unido, Rusia y China) varias sugerencias para incluir en un posible borrador de resolución.
Esas sugerencias incluyen la prohibición total de ciertas transacciones comerciales con Irán y la ampliación de la lista de iraníes cuyos activos en el exterior deben ser congelados y a quienes se les ha de prohibir viajar, así como la de los bancos iraníes con los que no se podrá hacer negocios.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.