Este artículo se publicó hace 14 años.
Problemas del sueño están ligados a aumento peso en mediana edad
Por Amy Norton
Como si envejecer no fuera losuficientemente duro, un nuevo estudio demostró que las mujeresde mediana edad o adultas mayores que tienen dificultades paradormir o mantener el sueño podrían engordar más que aquellasque descansan bien.
Varios estudios detectaron que los niños y adultos que noduermen bien son más propensos a tener sobrepeso que aquellosque duermen toda una noche entera.
Pero muchas de esas investigaciones evaluaron a laspersonas en un momento del tiempo, por lo cual es complicadosaber qué comenzó primero: los problemas para dormir o elexceso de peso.
Unos pocos estudios siguieron a los participantes en eltiempo, pero no han coincidido en que la mala calidad del sueñoesté asociada con el aumento de peso.
Los nuevos resultados, reportados en el InternationalJournal of Obesity, refuerzan las evidencias de que losproblemas del sueño están relacionados con los kilos de más.
En este caso, el diseño del estudio permitió a losinvestigadores demostrar que la dificultad para dormir seprodujo antes de un sustancial aumento de peso en algunosparticipantes.
Un equipo finlandés que siguió a más de 7.300 adultos de 40a 60 años durante siete años halló que las mujeres quereportaban significativos problemas para conciliar el sueño alcomienzo generalmente aumentaban más de peso en el tiempo.
Casi un tercio de las participantes con dificultadesfrecuentes para dormir subieron al menos 5 kilos, encomparación con un quinto de las mujeres sin problemas.
Entre los hombres no se registró el mismo efecto. Susdificultades para dormir no estuvieron relacionadas con elaumento de peso.
La asociación en las mujeres se mantuvo incluso cuando losinvestigadores consideraron un número de factores que puedenafectar tanto a la calidad del sueño como al incremento delpeso, como su peso al comienzo del estudio, sus hábitos deejercicio y su salud física y mental.
Si bien los resultados no confirman una relacióncausa-efecto, aumentan la probabilidad de que mejorar lacalidad del sueño ayude a prevenir el aumento de peso, dijoPeppi Lyytikainen, de la Universidad de Helsinki, a ReutersHealth.
Los 7.332 hombres y mujeres del estudio fueron los primerossondeados entre el 2000 y el 2002. Aquellos que dijeron quehabían tenido dificultades para dormir o mantenerse dormidosdurante al menos 14 noches el mes previo fueron clasificadoscomo participantes con problemas "frecuentes".
Los pacientes también reportaron su peso y altura durantela primera evaluación y volvieron a dar la misma información decinco a siete años después.
Al comienzo del estudio, el 20 por ciento de las mujerestenía problemas frecuentes del sueño. En general, eran tambiénmás propensas a reportar un "gran" aumento de peso, de 5 kiloso más, hacia el final del estudio, en comparación con aquellasque habían dormido bien.
Pero el 17 por ciento de los hombres que reportódificultades para dormir no tenían más probabilidad que elgrupo sin problemas a subir de peso.
La razón de esta disparidad entre hombres y mujeres esincierta, de acuerdo al equipo de Lyytikainen. Podría deberse aque el estudio incluyó a un número menor de hombres que demujeres (1.300 versus más de 5.700), lo que podría haberdificultado la identificación de algún efecto.
FUENTE: http://link.reuters.com/nub45m InternationalJournal of Obesity, online 8 junio del 2010.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.