La ONU se siente "decepcionada" por el rechazo del Gobierno israelí a la propuesta francesa de declarar una tregua de 48 horas en su ofensiva contra Hamás en Gaza, para hacer llegar ayuda humanitaria a la población del territorio palestino.

El subsecretario general de la ONU para Asuntos Humanitarios, John Holmes, señaló hoy que "lo que más se necesita en estos momentos es un alto el fuego inmediato que respeten ambos bandos para poder distribuir ayuda humanitaria, asistir a los heridos y evaluar los daños".

"Por eso estamos muy decepcionados por el hecho de que se rechazara la propuesta de declarar una tregua, una pausa, o como lo quieran llamar, de 48 horas", lamentó el diplomático británico en una conferencia de prensa.

En ese contexto, dijo esperar que los esfuerzos diplomáticos en favor de un alto el fuego "fructifiquen en los próximos días".

El Gobierno israelí anunció hoy su negativa a dar a la Franja de Gaza una "tregua humanitaria" de 48 horas, tal como había pedido el mandatario francés, Nicolas Sarkozy, que ostenta el cargo de presidente de la Unión Europea hasta la medianoche de hoy.

Holmes aseguró que la situación humanitaria en Gaza sigue siendo alarmante cinco días después de que el Ejército israelí iniciara una ofensiva contra el movimiento islamista Hamás, que desde junio de 2007 mantiene el control de este territorio palestino.

El subsecretario general de la ONU advirtió que, debido al caos causado por los bombardeos israelíes, no han podido confirmar las cifras de bajas ofrecidas por fuentes palestinas, que las sitúan en 393 muertos y 1.900 heridos.

Tampoco pudo confirmar la denuncia palestina de que un 40 por ciento de los fallecidos son civiles, pero agregó que "lo que queda claro es que son muchos y, bajo cualquier definición que se quiera utilizar, son demasiados".

"Es difícil transmitir el grado de terror que sienten los habitantes de Gaza sometidos a constantes bombardeos, que es también lo que se siente del lado israelí", expresó.

Cuatro israelíes han muerto por estos ataques desde el inicio de la ofensiva el pasado sábado, según el Gobierno hebreo.

La comisaria de la Agencia de las Naciones Unidas para los Refugiados Palestinos (UNRWA), Karen Abu Zayd, que participó en la conferencia de prensa vía satélite desde Gaza, aseguró que los habitantes de la Franja se sienten "decepcionados" por la negativa israelí a la tregua.

"Pensaban con alegría que por fin iba a ver una pausa de al menos un par de días, que iba a permitir la entrada de aprovisionamientos, y sin el ruido de las bombas y el sobrevuelo de los aviones", apuntó.

Zayd indicó que los habitantes de Gaza responsabilizan a Israel de su situación, pese a las explicaciones israelíes de que su operación militar es una respuesta a los bombardeos con cohetes que lanza Hamás.

La responsable de UNRWA informó que cerca de un centenar de camiones con alimentos y otros productos de necesidad llegaron el martes a la Franja, tras recibir el permiso de las autoridades israelíes para franquear los pasos fronterizos, que llevan meses cerrados al tráfico.

Sin embargo, la cantidad de alimentos, medicinas y productos de primera necesidad que llegaron en esos convoyes son insuficientes para aliviar las necesidades de la población civil, aseguraron Holmes y Zyab.

Señalaron que antes del inicio del bloqueo israelí hace un año y medio entraban en el territorio palestino una media diaria de 475 camiones.

A ello se agrega el cierre el martes de la planta generadora de electricidad por falta de combustible, lo que ha dejado sin luz a unas 660.000 personas y agrava la dependencia que tiene los hospitales de los generadores.

Holmes observó que las autoridades israelíes siguen negándose a permitir la apertura del conducto que alimenta de combustible a Gaza.

"Las razones por las que no se ha reanudado el suministro de combustible deben explicarlas los israelíes. Lo que nos dicen es que hay problemas de seguridad cerca del conducto", aseveró.