El primer ministro iraquí Nuri al Maliki, dijo hoy en Mosul, unos 440 kilómetros al norte de Bagdad, que el objetivo de la campaña militar que se desarrolla en esa ciudad es "limpiarla de las bandas terroristas criminales".

Maliki hizo la declaración en una reunión que presidió en la sede del mando de operaciones militares de Mosul y que contó con la participación de los ministros de Interior y Defensa, según un comunicado de su oficina citado por la agencia de noticias independiente iraquí Asuat al Irak.

El jefe del Gobierno afirmó que la campaña de seguridad "abrirá un nuevo capitulo en la vida de los habitantes de Mosul, ya que propiciará una atmósfera adecuada para que funcionen los servicios e instituciones del Estado".

Asimismo, subrayó la necesidad de que "nuestras fuerzas armadas y cuerpos de seguridad adopten las medidas que garanticen el éxito de las operaciones, tal como sucedió en (las operaciones emprendidas) en las ciudades de Bagdad y Basora", situadas en el extremo sur del país.

El primer ministro llegó en la mañana de hoy a Mosul, en una visita sorpresa para supervisar en persona la campaña de las tropas iraquíes contra la red terrorista Al Qaeda.

Por otra parte, Maliki instó a las fuerzas iraquíes a desplegar el máximo de esfuerzos para que en sus operaciones respeten los derechos humanos de los habitantes de Mosul.

Además, manifestó su satisfacción frente al deseo de la población local de ayudar a las fuerzas de seguridad a liberar Mosul de las bandas terroristas.

La nota explica que Maliki fue informado al detalle por el jefe de las operaciones militares, general Riad Yalal, sobre la marcha de la campaña y los pasos adoptados para su éxito.

El viaje del primer ministro a Mosul, la tercera ciudad más grande de Irak tras Bagdad y Basora, se produce cuatro días después del comienzo de la operación, denominada "Rugido del León", ofensiva a gran escala del Ejército iraquí contra los reductos de Al Qaeda