Este artículo se publicó hace 15 años.
Guttenberg dice que la oposición sabía que el bombardeo era para matar talibanes
El ministro alemán de Defensa, Karl Theodor zu Guttenberg, devolvió hoy las críticas de la oposición que le acusan de haber ocultado que el bombardeo en Kunduz era una operación ofensiva para matar talibanes y no meramente defensiva.
"A los que me acusan de haber mentido, les tengo que decir que tengan cuidado de que no se conviertan objeto de la misma acusación", advirtió hoy Guttenberg, en respuesta al jefe del grupo parlamentario verde, Jürgen Trittin, y el presidente del SPD, Sigmar Gabriel, quienes le han acusado de haber ocultado al parlamento que la operación tenía como objetivo matar talibanes.
El cruce de palabras se produce después de que varios medios de comunicación citaran este fin de semana detalles del informe realizado por la fuerza multinacional en Afganistán ISAF, que revelan que el cometido principal del comandante que ordenó el bombardeo el 4 de septiembre no sólo quería destruir unos camiones cisterna sino "aniquilar" a insurgentes.
Guttenberg aseguró hoy que los grupos parlamentarios de la oposición fueron informados de que no sólo los camiones cisterna, sino "también los talibanes eran un objetivo", el mismo 6 de noviembre, en que obtuvo el los primeros informes del bombardeo.
El caso del bombardeo, que ya ha costado el cargo al entonces ministro de Defensa y titular de Trabajo en el nuevo gobierno de centro-derecha, Franz-Josef Jung, sino también al jefe del estado Mayor, Wolfgang Schneiderhan, y al secretario de Estado de Defensa, Peter Wichert, ha adquirido una nueva dimensión jurídico-militar.
Mientras que la dimisión de Jung se debió en principio a la ocultación de informaciones sobre víctimas civiles, y las de Schneiderhan y Wichert por no haber informado adecuadamente a Guttenberg, ahora el debate se centra en si la operación fue legal o no.
El portavoz del Gobierno, Ulrich Wilhelm, explicó hoy que las tropas destacadas en Afganistán recibieron en julio pasado nuevas instrucciones "más precisas" sobre el alcance del mandato de la ONU para las fuerzas del ISAF.
Mientras que hasta entonces los militares alemanes se habían limitado a utilizar la fuerza militar exclusivamente con fines defensivos, las nuevas reglas permiten operaciones "preventivas" si se trata de "detener" con ello alguna operación insurgente.
Wilhelm precisó, no obstante, que el derecho internacional sólo permite este tipo de actuaciones ofensivas si no violan el principio de la proporcionalidad.
La pregunta que no quiso responder Wilhelm, por tratarse de un tema que ocupará a partir del miércoles a una comisión parlamentaria de investigación, es si el gobierno considera que el bombardeo de Kunduz en concreto fue desproporcionado o no.
Tampoco Guttenberg ha querido dar informaciones en público sobre asuntos que, según insistió, se tratarán en la citada comisión.
Nada más asumir el cargo, Guttenberg había calificado la operación de "apropiada", opinión que revisó cuatro semanas después, una vez tuvo constancia, según argumentó, de todos los detalles de la operación.
En su posterior declaración ante el parlamento, el ministro habló de una operación que "militarmente no fue apropiada".
El ataque con dos bombas de 500 kilogramos contra dos camiones cisterna secuestrados por insurgentes y atrapados en un banco de arena, causó hasta 142 muertos, entre ellos muchos civiles.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.