Este artículo se publicó hace 15 años.
El fuego obliga a cortar el AVE entre Madrid y Barcelona
Otras 1.000 personas son desalojadas en Teruel en el peor siniestro desde 1994
Un incendio forestal obligó ayer a suspender la circulación del AVE entre Madrid y Barcelona en el trayecto de línea comprendido entre Alcolea del Pinar (Guadalajara) y Medinaceli (Soria). El corte afectó a 3.669 viajeros. Hasta 16 trenes permanecieron estacionados lejos de los focos activos del fuego durante las tareas de extinción, que obligaron a cortar el suministro eléctrico en las dos vías del tramo de AVE próximo al siniestro.
El incendio obligó, asimismo, a evacuar a los vecinos de la población soriana de Urex. La Junta de Castilla y León informó que, pese a ser "estrecho", las llamas avanzaron con rapidez debido al fuerte viento. El fuego comenzó sobre las 14.30 horas. Una hora y media más tarde, se suspendió el servicio ferroviario en este tramo. Más tarde, a las 18.45 horas, otro incendio, declarado entre Calatayud y Ricla (Zaragoza), perteneciente a la misma línea del AVE, forzó al corte de tensión eléctrica.
Los responsables de Renfe prepararon un plan alternativo de transporte para todos los viajeros afectados, que incluyó aviones y autobuses. Al cierre de esta edición, el AVE entre Madrid y Barcelona aún no se había restablecido.
18 focos activosEn el resto de España, la situación ayer era preocupante. Hasta 18 focos permanecían activos, entre ellos el de Horta de Sant Joan (Tarragona), donde hace dos días fallecieron cuatro bomberos y otros dos resultaron heridos de gravedad. Según asociaciones ecologistas, este año ya se ha quemado la misma superficie de hectáreas que en todo 2008. Y las previsiones pueden ser aún mucho peores si la situación no mejora en las próximas horas.
La angustia se trasladó ayer a la provincia de Teruel, donde más de 1.000 personas fueron desalojadas de sus hogares ante la mayor ola de incendios de los últimos 15 años. En 1994, ardieron 30.000 hectáreas. Las autoridades evacuaron ayer las localidades de Ejulve, La Cañadilla, La Zoma, Cirugeda y Alloza. También en el municipio turolense de Andorra, los responsables municipales pidieron a los vecinos que abandonaran sus casas y se refugiaran en los polideportivos. En algunos puntos de esta zona, el fuego, originado por una tormenta eléctrica, estaba ayer "totalmente desbordado". En apenas un día, se calcinaron 4.500 hectáreas.
No menos dramática fue la situación en Cuenca, donde cuatro fuegos permanecían anoche activos en Uña y Poyatos. Una persona resultó herida y 350 vecinos fueron desalojados. También hubo cinco trabajadores forestales heridos en Palencia, cuando se dirigían a extinguir un fuego la tarde del martes.
Otro incendio afectó ayer a una zona de Ciudad Real, entre Viso del Marqués y Calatrava, en el corazón de La Mancha. Y en Burgos, anoche había riesgo de evacuación en las localidades de Dordoniz, Albaina y Pariza. También al norte de la península, en Larráyoz (Navarra) los bomberos luchaban ayer contra las llamas. Más al sur, en Alicante, seguían vivos los incendios de Bolulla y Muro de Alcoy.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.