Fernández de la Vega asegura que las elecciones europeas no eran un examen al Gobierno

La vicepresidenta primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, que no ha entrado a analizar la victoria del PP en las elecciones europeas, ha dicho que lo que hoy se planteaba no era un examen al Gobierno sino votar a los representantes europeos de los partidos.

Durante una rueda de prensa junto con el ministro del Interior, Alfredo Pérez Rubalcaba, en el Palacio de Congresos y tras conocerse la victoria del PP, De la Vega ha señalado que lo que planteaba la jornada electoral de hoy era "una confrontación" para elegir a los representantes europeos "y tiempo habrá -ha subrayado- de hacer una valoración del Gobierno".

En cualquier caso y pese a la insistencia de los periodistas para que ofreciera un análisis de los resultados, la vicepresidenta primera ha respondido que son los partidos los que tienen que hacer la lectura de los datos y ha recalcado que lo que se votaba era "la valoración" que hacían los electores de los candidatos "y no la valoración del Gobierno".

María Teresa Fernández de la Vega ha hecho hincapié en que la participación en las elecciones, con un 45,81 por ciento y muy similar a la de la convocatoria de junio de 2004, ha sido "muy digna".

La participación de los españoles, ha dicho la vicepresidenta primera, "nos coloca en la franja alta" de los países de la UE, y esto demuestra, en su opinión, que a España, "una vez más, les interesa Europa".

Además, ha expresado la satisfacción del Ejecutivo porque la jornada electoral haya sido "muy tranquila" y sin incidentes que merezcan la pena destacar.

Ha agradecido, por tanto, el comportamiento de los ciudadanos, de los representantes políticos y de todos los que han intervenido en el desarrollo de esta jornada electoral, incluidos los casi cien mil agentes de las Fuerzas de Seguridad del Estado.

De la Vega ha destacado también que la jornada haya sido de "plena normalidad" democrática y que la respuesta haya sido muy similar en todos los países de la UE, donde, en total, estaban convocados a votar 375 millones de electores.