Dificultades para llegar a fin de mes

Las opiniones sobre la situación económica general y particular no ha variado sustancialmente. Son una amplia mayoría los que piensan que la economía española está mal o bastante mal (un 78,2% de los entrevistados, frente al 81,2% de hace un año); y la mitad de los encuestados considera que, en el mejor de los casos, su situación económica personal podría calificarse de regular.

Esta opinión no significa que se piense que se ha mejorado; al contrario, los que piensan que su situación personal ha empeorado en 12 meses es mayor que la que existía en febrero de 2010: un 48,3% frente al 41,8% de hace un año. Así lo piensan, sobre todo, los mayores de 60, una circunstancia producida posiblemente por la congelación de las pensiones acordada por el Gobierno en sus medidas de ajuste.

En este contexto, el margen para el optimismo es corto. Un 41% opina que dentro de doce meses su situación será igual, y otro 27% cree que será peor; hace un año, estos porcentajes eran del 48,6% y del 18,3%, respectivamente.

Este ligero aumento del pesimismo se refleja también en la marcha de la economía doméstica. Suben los que confiesan que tienen dificultades para llegar a final de mes (son el 23,8% de los entrevistados, cuando hace un año era el 19,2%), en un momento en el que la inflación alcanza su nivel más alto en año desde finales de 2008, por la escalada de las materias primas y la subida de la tarifa de la luz.

Así se explica que 6 de cada 10 españoles confiesen que no han podido ahorrar en el último mes. Precisamente, los expertos destacan que gran parte del gasto actual de los hogares se sustenta en los ahorros conservados durante la crisis.