Cultura brinda un Premio Nacional a la tauromaquia

Dos semanas antes de las elecciones, la ministra de Cultura, Ángeles González-Sinde, brindó al mundo taurino su última faena con la creación del Premio Nacional de Tauromaquia. La orden, que publicó el Boletín Oficial del Estado (BOE) y entra hoy en vigor, establece una condecoración anual para un profesional del toreo (empresario, torero, ganadero o profesional vinculado al sector) de 30.000 euros, la segunda dotación económica más alta designada por el Ministerio para premios nacionales.

En total, el Ministerio entrega cada año 31 de estos galardones a personas ilustres de diferentes disciplinas culturales (Premio Nacional de las Letras Españolas, Fotografía, Teatro, Literatura, Historia...). "Pero este será el primero que cree polémica y división entre la sociedad española; no por quién sea el galardonado, sino porque más de la mitad de la ciudadanía rechaza esta práctica", critica el portavoz de la plataforma Galicia, mellor sen touradas, Rubén Pérez Sueiras.

Se trata de la segunda dotación más alta para este tipo de distinción

Además de la creación del certamen, Pérez Sueiras reprocha el momento elegido por González-Sinde: "La ministra fue de los pocos políticos que no criticó el Toro de la Vega, y ahora parece que se quiera despedir con un gesto más hacia los taurinos". "El premio es una forma de inyectar más dinero en una actividad cruel", asegura este activista.

Fuentes del Ministerio de Cultura niegan que el Premio Nacional de Tauromaquia se haya creado en clave electoral y justifican el momento de su publicación en el BOE alegando que "no se podía haber hecho antes" porque las competencias taurinas habían correspondido, hasta el pasado 29 de julio, al Ministerio del Interior. La idea del nuevo Premio Nacional se planteó por primera vez en 2010, según el Ministerio de Cultura.

El traspaso de responsabilidades mediante el Real Decreto 1151/2011, de 29 de julio fue anunciado hace un año y medio por Alfredo Pérez Ru-balcaba, que entonces ocupaba la titularidad de la cartera de Interior.

Los colectivos antitaurinos hicieron una lectura del cambio en clave económica, ya que las empresas vinculadas a la tauromaquia pasaron, de pagar el 18% del IVA por sus actividades, a tributar apenas un 8%, al ganar la vitola de actividades culturales.

"Es más dinero para una actividad cruel", critica un grupo animalista

El Real Decreto consagró la consideración de la actividad tauromáquica como una "disciplina artística" y, por lo tanto, "una actividad digna del fomento y la protección de la cultura", explica el Gobierno.

En las reuniones que mantuvieron los toreros con los ministerios de Interior y Cultura, los matadores reclamaron también un aumento del número de retransmisiones y más presencia de la tauromaquia en los informativos de la televisión pública.

Aunque no ha habido anuncios en este sentido, los colectivos antitaurinos temen la llegada del PP a la Moncloa: dentro del capítulo Comprometidos con el bienestar, el programa electoral de Mariano Rajoy promete "la protección de todas las manifestaciones artísticas tradicionales que sean parte de nuestra cultura, como la tauromaquia".

Los apuros económicos que viven las organizaciones taurinas han sido reconocidos en numerosas ocasiones por las empresas del sector que, desde 2007, han visto cómo los eventos celebrados en España se han reducido un 34%. Las empresas apelan a la crisis económica, mientras que sus detractores aseguran que se debe al creciente desinterés de la sociedad española por las corridas de toros y el aumento de la sensibilización popular.

Además de la creación del polémico galardón taurino, el Ministerio de Cultura aprobó también la creación del Premio Nacional de Fomento de la Creatividad en el Juguete. El objetivo es el reconocimiento de los méritos extraordinarios de un profesional de la industria, o de una empresa o institución que haya destacado "por su labor en favor de la difusión de los valores culturales del juguete". Esta condecoración también irá acompañada de una dotación de 30.000 euros.