AI pide a la ONU que denuncie a Siria ante el TPI por la matanza de Hama

Amnistía Internacional (AI) pidió hoy al Consejo de Seguridad de la ONU que "responda con urgencia" y sancione y denuncie a Siria ante el Tribunal Penal Internacional (TPI) por la violenta represión ejercida durante el fin de semana contra opositores en Hama y otras ciudades del país árabe.

"El Consejo de Seguridad tiene que responder con urgencia y denunciar la situación al TPI", pidió hoy la organización defensora de los derechos humanos en un comunicado difundido en Nueva York.

Agrega que las fuerzas de seguridad del régimen de Bachar al Asad "siguen atacando la ciudad de Hama, donde docenas de personas han sido asesinadas".

El Consejo de Seguridad de la ONU se reúne hoy a partir de las 21.00 GMT para analizar las posibles acciones a tomar ante el recrudecimiento de la represión del Gobierno sirio contra los manifestantes de la oposición, después de que el domingo murieran al menos 120 persones en el país árabe.

A esas víctimas se suman otras dos ocurridas hoy en la localidad de Hama, en donde el domingo murieron al menos 52 personas, incluyendo cuatro niños, según los datos de AI, como consecuencia de los ataques del ejército sirio contra los manifestantes.

"Las autoridades sirias han realizado su ataque más letal contra manifestantes en su mayoría pacíficos que pedían reformas", dijo el subdirector de AI para Oriente Medio y Norte de Africa, Philip Luther, en ese comunicado de prensa.

"Ha pasado mucho tiempo sin que el Consejo de Seguridad de la ONU tome medidas concretas para acabar con la sangrienta represión en Siria, donde siguen produciéndose víctimas entre los manifestantes pacíficos", afirmó Luther.

Agregó que "está claro que el presidente Bashar al Asad no va a parar a sus fuerzas de seguridad, por lo que la ONU tiene que tomar acciones decisivas para acabar con su violenta campaña de represión".

Entre las sanciones que AI reclama contra el régimen de Damasco están "la imposición de un embargo de armamento, congelar los activos de Al Asad y otros altos cargos por su responsabilidad (en la comisión) de crímenes contra la humanidad y la denuncia de la situación ante el fiscal del TPI".

AI denunció que, además de que los tanques del ejército sirio entraron el domingo en Hama, causando la muerte a docenas de personas, las fuerzas de seguridad de Al Asad atacaron también la ciudad oriental de Dayr Al Zor, en donde hubo otros once muertos.

Asimismo indicó que un activista proderechos humanos sirio denunció varios secuestros y que un empleado de uno de los hospitales de Hama les "informó de que el domingo recibieron 19 cadáveres, de los que uno era de un policía y los demás civiles. Todos tenían disparos en el pecho y en la cabeza".

El agente de policía fallecido, identificado como Mahmud Abud, según AI "estaba supuestamente mediando entre los manifestantes y la Policía cuando recibió un disparo en la cabeza y fue trasladado al hospital por los opositores".

Amnistía Internacional dijo también haber recibido "los nombres de más de 1.500 personas que podrían haber muerto desde que comenzaron las protestas en favor de las reformas a mediados de marzo" pasado, y que muchos de ellos, según sus informaciones, recibieron disparos de las fuerzas de seguridad y el ejército de su país.

Esta organización también denunció las detenciones de miles de sirios, muchos estarían incomunicados y "otros muchos habrían sido torturados o maltratados durante su proceso de custodia, resultando muertos algunos de ellos".

"En base a una investigación propia, AI ha concluido que (en Siria) se han cometido crímenes contra la humanidad que parecen ser parte de ataques generalizados y sistemáticos contra la población civil", señala la organización en su comunicado.