Rafael Aguilar, técnico de la selección española de waterpolo, se mostró satisfecho con la actuación de su equipo en los tres primeros parciales del encuentro contra Hungría, ante la que perdió por 8-5, pero aseguró que "para ganar a un equipo como este hay que tener cuatro partes brillantes".

Aguilar, quien consideró que su equipo había jugado bien también en el tercer periodo porque pese a no marcar tampoco consintió que lo hicieran los actuales campeones olímpicos, dijo que España había trabajado en defensa "con un nivel muy alto los cuatro tiempos, porque encajar ocho goles ante Hungría es un buen dato".

Se lamentó, en cambio, de que no se aprovecharan dos superioridades numéricas al inicio del cuarto y último parcial que "eran imprescindibles" para tener opciones de luchar por el partido, lo que su equipo no consiguió.

Aseguró que sus jugadores saben lo que tienen que hacer y que "se levantarán rápido y afrontarán el siguiente partido (contra Montenegro, el sábado a las 14.00 hora local, seis menos en la península) como ganadores".

Aguilar explicó que el hecho de que se perdieran algunas superioridades después de haber agotado el tiempo de las exclusiones y permitiendo la entrada del jugador rival era una cuestión táctica, "es una estrategia, porque como se vio en Melbourne (en los Mundiales 2007) el 70 por ciento de los goles se consiguieron en ese momento, cuando volvía el jugador".

Preguntado acerca de Montenegro, equipo que se proclamó campeó de Europa en Málaga antes de viajar a los Juegos Olímpicos, aseguró: "A por ellos".