Esperanza Aguirre debería ir a prisión sin fianza según sus propias palabras en 2014

Este lunes, Esperanza Aguirre y Cristina Cifuentes fueron imputadas en la trama Púnica por la financiación ilegal del PP de Madrid junto a más de 40 personas. Algo que Aguirre quizá no se esperaba unos años antes cuando hacía unas rotundas propuestas contra la corrupción política que hoy suenan como un verdadero ‘autozasca’.

Corría noviembre de 2014. Pocos días antes, Francisco Granados, el exnúmero dos del PP de Madrid y exconsejero autonómico de la Comunidad, había sido detenido en una macrorredada contra la corrupción con más de 50 detenidos, entre ellos dos alcaldes de Madrid y el presidente de la Diputación de León, en lo que llamaron ‘Operación Púnica’.

Con las miradas centradas en ella, Esperanza Aguirre publicó una serie de tuits tratando de mostrarse como una víctima y proponiendo dureza contra la corrupción. En concreto seis medidas, tan abstractas como populistas ¿La primera de ellas? La “posibilidad de ordenar la prisión inmediata no eludible con fianza para políticos y cargos públicos imputados por delitos de corrupción”. Lo justificaba así: "Si todos los imputados por el caso Gürtel estuvieran en la cárcel desde que fueron descubiertos otros hubieran evitado caer en la tentación".

Esta semana muchos usuarios de las redes sociales han recordado aquellas palabras de Aguirre.

Estas son otras de las medidas que proponía: