Este domingo no será un día más para los herederos de militancia de miles de presos y fusilados por la dictadura franquista. Tampoco pasará inadvertido entre los muros del último gran símbolo del régimen.

Las fotos lo explicarán todo: en torno a las 12.00, las banderas anarcosindicalistas de CNT llegarán al Valle de los Caídos para pedir el fin de este mausoleo de la ultraderecha.

Tampoco 2019 será un año más en Cuelgamuros. Si el Gobierno (en funciones) de Pedro Sánchez cumple con su palabra, los restos de Francisco Franco que siguen allí enterrados tienen, en principio, las semanas contadas: el próximo 10 de junio debería producirse su exhumación, aunque el Tribunal Supremo –que analiza los recursos interpuestos por la familia del dictador- podría frenarlo. El misterio, de momento, continúa.

Ni Franco ni la cruz franquista

En cuanto a qué hacer con los restos del dictador, CNT propone que se adopte “la solución tomada por Alemania en el caso de otros reconocidos fascistas”: “tirar sus cenizas en algún lugar ignoto”. En cualquier caso, este sindicato –que llegó a ser mayoritario en España cuando se produjo el golpe de Estado franquista- defiende que no sólo los huesos de Franco deben ser sacados de allí, sino que reivindica que también sean retirados los restos del líder falangista José Antonio Primo de Rivera. "Ambos deben ser exhumados", afirma a Público Luis Fuentes, integrante del grupo de memoria histórica cenetista.

La concentración de este domingo ante el Valle de los Caídos –de cuya construcción se cumplen en 2019 sesenta años- incluirá también otros reclamos. Según avanzó CNT en una declaración, exige además la "expulsión, previa auditoría de cuenta y bienes, de los monjes benedictinos" que gestionan este sitio. Su máximo responsable, Santiago Cantera, es un firme defensor del franquismo y llegó a ser candidato en listas de Falange. “Y que el Estado deje de financiarlos, ni allí ni en otro lugar”, continúa el manifiesto.

En ese contexto, el sindicato plantea que el Valle de los Caídos se convierta "en un lugar de memoria y recuerdo a las víctimas del franquismo, donde desaparezca toda simbología franquista y, sobre todo, la cruz". "Principalmente, hay que acabar con el enaltecimiento del franquismo y de Franco", añade Fuentes.

"Inconcebible"

El secretario general de CNT, Enrique Hoz, tiene muy presente las imágenes de ultraderechistas lanzando vivas a la dictadura en ese mismo escenario. “Estamos hablando de un monumento de peregrinación fascista construido, para más bochorno, por prisioneros antifranquistas”, señaló a Público. “Es inconcebible que en un país que se reclama democrático, se permita que se rinda culto a quienes acabaron con los derechos y libertades conseguidas a fuerza de años y años de lucha”, agregó.

No en vano, la movilización de este domingo tendrá muy presente a los miles y miles de militantes antifascistas que fueron asesinados por el franquismo. “El Valle de los Caídos representa la ignominia para las personas que murieron luchando contra el fascismo o fueron asesinadas durante la guerra y la dictadura”, subraya el sindicato en su declaración.

Tampoco faltarán los reclamos al Gobierno de Pedro Sánchez, tanto al que está en funciones como al que se constituya en las próximas semanas. "No entendemos a qué hay que esperar para demoler la cruz y llevar adelante una identificación de todos los restos", sostiene Fuentes, uno de los tantos militantes cenetistas que este domingo marchará hasta el valle de la ignominia.