Este artículo se publicó hace 5 años.
El rapero Pablo Hasel pasa una noche en el calabozo para recibir una citación judicial
El rapero catalán, ya en libertad, fue detenido este domingo y trasladado a la comisaría de Vinaroz, donde pasó la noche. El motivo era notificarle que el próximo 15 de octubre tiene un nuevo juicio por los incidentes que tuvieron lugar en la Universitat
Alejandro Torrús
Madrid--Actualizado a
El rapero catalán, Pablo Hasel, ha sido puesto en libertad este lunes tras haber pasado la noche del domingo electoral en el calabozo de la comisaría de Vinaroz (Castellón) tras ser detenido por la Guardia Civil. El motivo: hacerle entrega de una citación para un nuevo juicio al cantante que se celebrará el próximo 15 de octubre. El objeto de este proceso es la denuncia que interpuso contra el rapero un periodista de TV3 por una presunta agresión durante un encierro de estudiantes y jóvenes en el despacho del rector de la Universitat de Lleida.
La detención del rapero se produjo por una orden del juzgado de lo penal nº1 de Lleida, a la que ha tenido acceso Público, que alega que no había sido posible notificar de otro modo la citación judicial al cantante. Fuentes de la defensa, no obstante, señalan que la decisión de que el rapero pasara una noche en prisión "tiene pinta de escarmiento".
"Hasel es una persona conocida en Lleida. Hay mucha gente que sabe dónde vive y tampoco es una persona que se esconda. Se podía haber gestionado este asunto de otra manera para que no tuviera que pasar una noche en prisión por una citación judicial", señalan a Público fuentes de la defensa de Hasel.
El cantante, que mantiene recurrido en el Supremo su reciente condena por enaltecimiento del terrorismo e injurias a la Corona en sus letras y tuits, fue detenido cuando regresaba de acudir a la salida de prisión del histórico preso del GRAPO José Francisco (Paco) Cela Seoane, que salía de prisión tras cumplir una condena de más de 30 años.
El rapero Pablo Hasel fue condenado por la Audiencia Nacional a dos años y un día de prisión por el delito de enaltecimiento del terrorismo y a pagar una multa de 24.300 euros por injurias a la Corona y a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado. La condena, no obstante, fue rebajada a nueve meses de prisión por la Sala de Apelación de la Audiencia Nacional al entender que si bien el rapero había cometido los citados delitos se debía aplicar el mínimo legal porque sus mensajes no suponían un "riesgo real" para las personas.
Esta sentencia de la Sala de Apelaciones está recurrido ahora, tal y como indican fuentes de la defensa, al Tribunal Supremo. La defensa del rapero también ha argumentado ante el Supremo que la sentencia condenatoria de la Sala de Apelaciones fue emitida por los magistrados Enrique López y Eloy Velasco, que actualmente ya no forman parte de este tribunal ya que el Supremo dictaminó que su nombramiento no se ajustaba a los requisitos necesarios.
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