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Ordenan el ingreso en prisión de tres proxenetas de la red de empresarios pederastas en Murcia

La Audiencia ha suspendido el ingreso en prisión de los siete empresarios que pagaron por prostituir a las chicas por un acuerdo con la Fiscalía y por las dilaciones indebidas del proceso.

Uno de los condenados por prostitución de menores a su llegada a la vistilla para decidir sobre la suspensión de la pena de prisión, en el Palacio de Justicia de Murcia, a 7 de octubre de 2024.
Uno de los condenados por prostitución de menores a su llegada a la vistilla para decidir sobre la suspensión de la pena de prisión, en el Palacio de Justicia de Murcia, a 7 de octubre de 2024. Marcial Guillén / EFE

La Sección 3 de la Audiencia Provincial de Murcia ha acordado este martes el ingreso en prisión inmediato durante seis años de las proxenetas Ruth D.T. y Nelly C.P. y del 'taxista' Walter D.M., al considerarlos máximos responsables de una red de prostitución de menores.

Los responsables de la organización reconocieron haber buscado 11 chicas a sabiendas de su minoría de edad para prostituirlas con hombres, algunos de avanzada edad y de buena situación económica. "Estaban ejecutando una de las formas más graves de violencia contra las mujeres que se pueden acometer", argumenta el auto judicial.

El Tribunal condenó el pasado día 11 de septiembre a siete empresarios por pagar por prostituir a las chicas –en algún caso hasta a cinco de ellas–, pero, por un acuerdo con la Fiscalía y por las dilaciones indebidas del proceso (más de diez años de retraso), se les impusieron condenas de entre cinco y quince meses de cárcel.

La Audiencia suspendió su ingreso en prisión con la condición de que no vuelvan a delinquir, pese a dejar constancia de la gravedad de los hechos y de que ellos sabían que las chicas prostituidas eran menores.

Cinco de las víctimas se mostraron favorables a que se les concediera la suspensión de las penas a los condenados, dos manifestaron estar conformes con la decisión que tomara el tribunal y cuatro se opusieron a que se les concediera el beneficio, explica el auto.

Los empresarios tienen la prohibición de comunicación o aproximación a las víctimas y "su participación en un programa de reeducación conductual en materia de sexualidad".

En el caso de los proxenetas, la suma de las penas oscila entre los dieciséis y los doce años, pero la Audiencia ha establecido en seis años límite máximo de cumplimiento.

Los acusados Ruth, Nelly y Walter deberán pagar penas de multa de 4.300, 3.240 y 4.320 euros, respectivamente, y los tres tendrán además libertad vigilada por cinco años además del pago de indemnizaciones a las víctimas que ascienden a 17.000 euros que los dos últimos ya han satisfecho, quedando pendiente 8.000 euros por parte de la primera.

Los intermediarios de la red delictiva Martín D.T. y Manuela P.P., han sido condenados a un año y tres meses de prisión, y a seis meses, respectivamente, pero en su caso no ingresarán en la cárcel.

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