El pasado jueves, los vecinos de un barrio situado en la provincia de Ordu, al oeste de Turquía, dieron la voz de alarma a los bomberos al ver cómo las llamas estaban devorando una vivienda de madera de una sola planta. Cuando llegaron, el equipo de rescate logró sacar con vida a un anciano y a un gato, pero no pudo hacer mucho más por salvar su casa, que se derrumbó consumida por el fuego.

En aquella casa vivía Ali Mese, un hombre de 83 años, junto con algunos algunas gallinas y unos cuantos gatos. Ese fatídico jueves quiso encender una estufa de gas pero algo salió mal y se produjo una pequeña explosión que terminó causando el incendio que arrasó prácticamente con todas sus pertenencias.

En una emotiva foto que ha dado la vuelta al mundo, Mese abraza al único superviviente, un gato asustado mientras los bomberos inspeccionan los daños. El hombre se ayuda de su bastón con una mano, mientras que con la otra se aferra a su querida mascota. Ninguno de los dos parecer querer alejarse el uno del otro.

Después de esa foto, Mese tuvo que ir al hospital a recuperarse de algunas heridas ocasionadas durante el incendio. Mientras se recuperaba, su historia se extendió por toda Turquía y el resto del mundo. Su fotografía había conmovido a tantas personas que al hospital comenzaron a llegar decenas de regalos no tanto para Mese, sino para su gato.

En cuanto se recuperó, la Cruz Roja Internacional hizo lo posible por reunir a Mese con su gato, dando lugar a otra emotiva estampa. Esta vez, con una sonrisa dibujada en su rostro.