La Conselleria de Justicia, Derechos y Memoria de la Generalitat de Cataluya ha iniciado este lunes los trabajos para exhumar los restos Cipriano Martos, un militante antifranquista, que fue asesinado bajo las torturas de la Guardia Civil en 1973.  Según ha explicado el departamento en un comunicado, Martos fue el último desaparecido del franquismo. 

Los trabajos de exhumación se sitúan en una fosa del cementerio municipal de Reus (Tarragona) y la previsión es que duren unos dos meses y medio.

En este proceso de excavación participarán antropólogos forenses y arqueólogos para encontrar los restos, que están en una fosa común donde hay otros cuerpos. Cuando se localicen los restos óseos de Martos se tomarán muestras de ADN para verificar su identidad.

El director general de Memoria Democrática, Alfons Aragoneses, ha acudido al inicio de los trabajos junto al hermano del militante, Antonio Martos, y ha señalado: "Estamos hablando de derechos humanos, derechos de las familias y derecho de la sociedad catalana para saber qué ocurrió durante la guerra civil y el franquismo".

"Gracias a la familia, asociaciones y periodistas como Roger Mateos, que sacaron a la luz la figura de Cipriano, la sociedad se organizó y pidió a la administración que interviniera en la fosa", ha contado Aragoneses, que también ha destacado la experiencia de los trabajadores que harán la exhumación.

¿Quién es Cipriano Martos?

Cipriano Martos nació en 1942 en la Loja (Granada), en el seno de una familia de campesinos pobres. En 1969 emigró a la ciudad de Sabadell (Barcelona), aquí se politizó y se introdujo en el Partido Comunista de España (marxista-leninista), una extensión del PCE que propugnaba intensificar las acciones contra la dictadura y no renunciaba a la lucha armada.

Más adelante, el partido fundó el Frente Revolucionario Antifascista y Patriota (FRAP), un conglomerado de organizaciones tuteladas por el PCE. Martos fue destinado a una célula clandestina en Reus. En agosto de 1973 fue detenido por la Guardia Civil, que lo interrogó durante días, hasta que la ingesta del ácido sulfúrico obligó a ingresarlo urgentemente en el hospital. Estuvo agonizando durante más de 20 días. Su familia no sabía dónde se encontraba.

El caso de Cipriano Martos fue incluido en 2014, a instancias de su un hermano, en la macroquerella presentada ante la justicia argentina por delitos de genocidio y crímenes de lesa humanidad cometidos por el régimen franquista.