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Detectan sumisión química en una de cada tres agresiones sexuales de los últimos cinco años

El Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses "constató" 3.001 agresiones sexuales en 2021 y practicó análisis en 994 de ellas ante la sospecha de que pudieran haberse cometido con la víctima bajo sumisión química: el resultado fue positivo en el 72% de los casos.

La ministra de Justicia, Pilar Llop (c), posa junto a Cristina Albarrán (i), jefa del servicio de Biología del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, y Begoña Bravo, jefa del servicio de Química del Instituto Nacional de Toxicología y Cien
La ministra de Justicia, Pilar Llop, posa junto a Cristina Albarrán, jefa del servicio de Biología del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, y Begoña Bravo, jefa del servicio de Química del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses, este martes en Madrid. Emilio Naranjo / EFE

El Ministerio de Justicia estima que una de cada tres agresiones sexuales en los últimos cinco años podría haberse producido "con la víctima bajo estado de sumisión química".

Son unos datos gravísimos. Sin embargo, podrían ser solo la "punta del iceberg". La ministra Pilar Llop, en rueda de prensa, ha explicado que hay "indicios para creer" que hay muchos más casos que aún se escapan, recoge Efe.

Llop ha presentado este 8 de marzo los resultados del trabajo del Instituto Nacional de Toxicología y Ciencias Forenses (INTCF) sobre violencia sexual y sumisión química.

Llop indica que hay dos tipos de sumisión química: la oportunista y la predemitada

La ministra ha informado además de que el instituto "constató" 3.001 agresiones sexuales el año pasado y practicó análisis en 994 de ellas ante la sospecha de que pudieran haberse cometido con la víctima bajo sumisión química.

"El resultado dio positivo en el 72% de los casos", indicó la ministra.

Además, Llop ha afirmado que este tipo de violencia está cada vez "más extendida". Y ha añadido que existen dos tipos de sumisión química: la oportunista, en la que el agresor aprovecha la falta de voluntad porque la víctima ha consumido algún tipo de sustancia; y la premeditada, en la que es el propio agresor el que la proporciona.

Por último, en la rueda de prensa ha asegurado que desde Justicia están trabajando para luchar contra la violencia sexual. Así, están desarrollando un kit de muestras para el análisis toxicológico en casos de sumisión química y que en el anteproyecto de Ley Enjuciamiento Criminal (LeCrim) se regulará por primera vez la cadena de custodia de este tipo de material.

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