Este artículo se publicó hace 8 años.
‘Buscando a Nessie’: pedaleando por la lucha contra la leucemia
Cuatro jóvenes recorrieron Escocia en bicicleta en un proyecto social para recaudar fondos para la Fundación Josep Carreras: “Fue muy duro, pero mereció la pena en todos los sentidos”. Durante el trayecto, se recaudaron más de 3.000 euros mientras buscaban a los Nessies de siete niños con leucemia
-Actualizado a
MADRID.- Fue “tan sencillo y tan complicado” como recaudar 3.000 euros entre cuatro personas, realizando un viaje por Escocia durante 22 días. Iñaki, Borja, Manu y Carlos eran los aventureros, pero los protagonistas eran siete niños de la Fundación Josep Carreras contra la leucemia. El objetivo, conseguir recaudar fondos para la investigación de esta inexplicable enfermedad.
Buscando a Nessie es una iniciativa social, en la que cuatro jóvenes aventureros recorren Escocia en bicicleta, en busca del monstruo de Lago Ness de cada uno de los siete niños de la Fundación Josep Carreras, mientras recaudan donativos destinados íntegramente a la lucha contra la leucemia a través del Crowfunding. Carlota, Jon, Ainara, Julio, Esthephany, Jorge y Carla siguieron este agosto la búsqueda de sus Nessies por el país británico.
Lo único que tenían claro era que querían viajar y que lo harían por un tema solidario: “Las dudas sobre cómo hacerlo nos invadieron, y decidimos que lo primero era fijar el destino. ¿Irún? ¿París? De repente Manu dijo: ‘Escocia. La leyenda del monstruo del Lago Ness’. Y se le ocurrió: Buscando a Nessie”.
La Fundación Josep Carreras no se lo pensó dos veces, fue la primera con la que contactaron y el "sí" llegó en cuanto le contaron su idea de proyecto: “Cada peque dibujaría cómo se imaginaba al monstruo del Lago Ness y, gracias a un patrocinador que nos diera el visto bueno, que la fábrica de peluches los hiciera realidad”.
El Crowfunding se inició el 9 de abril y tenía como objetivo 3.000 euros, que fueron superados al finalizar el proyecto social, con 3.105 euros recaudados. Todos los gastos del viaje los asumen los cuatro aventureros, a excepción de los fondos que consiguen a través de la venta de 1.200 pulseras para viralizar el proyecto. Carlos asegura que su beneficio personal ha sido "darle una motivación a unos niños, que han sido partícipes de una aventura increíble”.
A las 7 de la mañana sonaba el despertador, les esperaban 80 kilómetros al día en bicicleta. Se alimentaban a base de pasta y arroz y acampaban con los sacos de dormir cuando daban las doce de la noche: “Recuerdo mirar el reloj y saber que tenía tan solo cinco horas para dormir e invadirme todo el cansancio de golpe, pero me metía en Facebook y veía una avalancha de apoyos. Entonces dices a por todas”, asegura Carlos.
Los cuatro jóvenes aseguran que durante el viaje se cruzaron con gente muy solidaria, que les proporcionaba la ayuda que necesitaran: “La primera noche en la Isla de Skye llovía a cántaros y dormimos en los baños públicos de un bar, donde nos invitaron a cenar y nos aportaron un donativo para el proyecto”.
Ainara, la más pequeña con tan solo tres añitos, ya ha recibido su Nessie, junto a Carla, Jorge, Esthephany y Jon. Aún quedan dos niños más por recibirlo en sus casas. Carlos, Iñaki, Manu y Borja se plantean un segundo proyecto solidario para el verano de 2017, aunque aún no han decidido si será por la misma causa o si abrirán otro campo. Lo que sí tienen claro es que será “siempre solidario”.
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