La vicepresidenta segunda del Gobierno y ministra de Trabajo, Yolanda Díaz, ha mostrado este domingo su confianza en alcanzar un acuerdo para reducir la jornada laboral en España. Sin embargo, ha advertido de que si no se logra el consenso necesario, el Ejecutivo actuará de manera unilateral para implementar la medida.

Durante su intervención en un debate organizado por el PCE, Díaz ha afirmado: "Queremos acuerdos, trabajamos para ello, y es posible alcanzarlos. No obstante, si no hay consenso, el Ministerio de Trabajo y el Gobierno de España procederán a reducir la jornada laboral, tal como hicimos con el salario mínimo interprofesional".

Díaz ha destacado el cambio de actitud de la opinión pública y el avance de varias formaciones políticas hacia la reducción de la jornada laboral. Para ella, esta medida es clave para mejorar la calidad de vida de los trabajadores, y por ello, confía en que se alcanzará un acuerdo. "Creo que lo vamos a conseguir, porque esta medida ayuda a vivir mejor", enfatizó.

La ministra ha explicado que la reducción de la jornada laboral tiene como objetivo mejorar la calidad de vida y fomentar un reparto justo de la productividad. Ha señalado que la productividad de los trabajadores en España ha crecido más del 15%, mientras que la del capital ha disminuido en 21 puntos. Por lo tanto, ha insistido en que este debate debe centrarse en equilibrar los beneficios, especialmente en un contexto de grandes márgenes empresariales.

Díaz ha subrayado que este debate es fundamentalmente democrático, ya que implica "ganar tiempo para la vida", lo que permitiría a las personas disfrutar de más tiempo libre y vivir con dignidad. "Queremos ser humanos, necesitamos tiempo para vivir, y eso es esencial", ha reiterado.

También ha hecho un llamamiento a los sindicatos, agradeciéndoles su trabajo en este ámbito y animándolos a seguir movilizándose de manera constante. "Lo vamos a ganar, no tengáis ninguna duda", ha asegurado, pidiendo que la movilización llegue a todos los rincones del país.

En su opinión, la propuesta de reducción de la jornada laboral cuenta con el respaldo mayoritario de la ciudadanía, lo que incluso ha llevado a figuras como el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, a pronunciarse sobre el tema. "No pueden posicionarse en contra de lo que la gente quiere, incluso votantes de Vox apoyan esta medida", ha argumentado Díaz.

La medida original, a proposición de Sumar, incluía una reducción progresiva hasta alcanzar las 32 horas –cuatro días semanales– en 2032 y lograr las 37,5 horas semanales este mismo año. En la actualidad, Trabajo se ha abierto a disminuir la jornada a las 38,5 horas en 2025 y conseguir las 37,5 en 2026.

Los partidos deben decidir de qué lado están

La vicepresidenta ha señalado que los partidos políticos deben tomar partido en este debate histórico. Según ella, el PP se ha visto obligado a distanciarse de la CEOE para no quedar al margen de un debate que considera "de época". Según Díaz, "el viento está a favor de la gente" y, cuando eso ocurre, las decisiones acaban siendo favorables para la ciudadanía.

Díaz ha calificado este proceso como "la batalla de época", ya que marcará un antes y un después en España, y abrirá nuevas perspectivas para la población. "Esta decisión es clave, y tenemos razones de sobra para llevarla a cabo", ha concluido.

El secretario general de CCOO, Unai Sordo, también ha intervenido en el debate, destacando la importancia de que el Partido Popular se haya sentido presionado para tomar posición. "El hecho de que el PP se sienta obligado a hablar del tema muestra que la reducción de la jornada laboral ya es parte de la conversación pública", ha afirmado.

Sordo ha destacado que esta es una batalla sindical que también tiene una vertiente política, y aunque reconoce que no es fácil, cree que se puede ganar. "Debemos explorar todas las opciones en la mesa de diálogo social, aunque la CEOE se haya mostrado reticente hasta ahora", ha explicado.

Para Sordo, si se lograra un acuerdo con la patronal, sería más fácil implementar esta medida en los convenios colectivos y empresas. Además, ha mencionado que en territorios como Euskadi, donde la jornada laboral media ya es reducida, no existe un gran incentivo para oponerse a la medida.

El secretario general de UGT, Pepe Álvarez, también se ha referido a la posición de Junts, calificando su actitud de ambivalente. "Aunque presumen de ser muy independentistas, no tienen problemas en llegar a acuerdos con las empresas españolas", ha criticado.

Finalmente, tanto Díaz como los líderes sindicales han resaltado la necesidad de generar el ambiente adecuado para que la CEOE participe de manera proactiva en las negociaciones. "Es importante hablar de la jornada laboral con rigor, ya que aún existe mucha desinformación sobre el tema", ha concluido Álvarez.