La ONG conservacionista WWF ha reclamado este martes al presidente del Gobierno andaluz y también presidente del PP, Juanma Moreno, que retire la proposición de ley que su partido promueve en Doñana para ampliar las zonas regables en el entorno del Parque Nacional.

Los acuíferos están sobreexplotados y la medida supone, según la asociación ecologista, una "amnistía" para quienes acceden hoy de manera ilegal al agua para el cultivo de fresas y frambuesas, una industria que deja cientos de millones de euros en la comarca.

La propuesta del PP, presentada por separado con Ciudadanos y con Vox en dos textos idénticos y que se someten mañana, miércoles, al inicio de su tramitación parlamentaria, abre la puerta a cambios en el uso de suelos, que pasarán a ser agrícolas regables, y que, según WWF, son miles de hectáreas.

La idea del PP, que pretende contentar a un sector de los agricultores particularmente beligerante a las puertas de las elecciones llega meses después de una sentencia de la UE contra España por no cuidar los acuíferos. La alarma que ha generado la proposición de Ley en Europa –la Comisión ha enviado una carta demoledora a España en la que amenaza con pedir sanciones si se aprueba esta normativa– no ha frenado a Moreno (PP), quien sigue adelante con la ley, de momento, aunque se ha abierto a negociar y al diálogo.

Por un lado, el presidente ha tratado de esquivar el conflicto, por la vía de no hacer informes al respecto desde el Gobierno, y por otro, ha pasado olímpicamente del serio aviso que supone la carta de la UE a España: "Las supuestas multas de UE son ciencia ficción, futurología".

La consejera de Agricultura, Carmen Crespo, pretende ahora explicar lo que no han hecho antes de presentar la proposición de Ley –"la llevaron al Parlamento dos semanas después de un Consejo de Participación de Doñana", afirma WWF–. Y el presidente defiende, a su manera, la filosofía de la propuesta del partido que preside: "Proteger el parque no significa que sea una isla, un muro de hormigón que genere rechazo social en los vecinos y los alcaldes".

Atila

Moreno, a pesar de sus proclamas verdes, ya recibió en el año 2020 el premio Atila, que Ecologistas en Acción concede con el objetivo de "distinguir y denunciar a aquellas personas, entidades o proyectos que más hayan destacado por su contribución a la destrucción del medio ambiente". El motivo: "Promover normas y leyes de desregulación del urbanismo y el medio ambiente, con su propuesta de nueva Ley del Suelo de Andalucía".

"El presidente se equivoca. No me creo que la Junta no sepa lo que hace el PP. Retire usted su propuesta. Esto es una ley especial, muchas de ellas se han tumbado en los tribunales. Siéntenos. Y haga las reuniones y los informes a los que la ley obliga y hágalo como debe hacerse", afirmó Juanjo Carmona, de WWF en una rueda de prensa en Huelva.

"Vamos a seguir informando a las autoridades europeas para que sepan que los compromisos no se están cumpliendo y vamos a estudiar acciones legales", agregó.

"Las consecuencias se están viendo ya. Si en Doñana se vinieran aplicando las normas, hoy en día el acuífero no estaría sobreexplotado. Los agricultores legales van a ver ahora el problema, si esto es así [si se aprueba la norma], las dotaciones tendrán que reducirse. Van a ver a su vecino regando ilegal y ellos con el contador y no vas a tener agua", dijo Carmona sobre los problemas que puede generar amnistiar, en lugar de perseguir a quien riega ilegalmente. "Ya hay competencia desleal. Ahora más. La competencia es tremenda. Daño a la imagen del sector y a la fresa", agregó Felipe Fuentelsaz, técnico de WWF.

Carmona describió el problema del agua con una metáfora: "Esto es como si recibes una herencia. Te pones un sueldo de mil, pero gastas 1500. Al final te quedas sin nada. Las cosas han cambiado. Llueve menos".