Este artículo se publicó hace 3 años.
Tudanca asumirá el desafío más difícil para los socialistas en Castilla y León
Tras ganar las últimas elecciones, nadie cuestiona que volverá a ser el candidato, aunque en un contexto más complejo. El líder burgalés ha logrado unir el partido en su región, pero ha tenido poca proyección nacional. En el PSOE se admite que es complica
Manuel Sánchez
Madrid-
Luis Tudanca quiere repetir el milagro de 2019, donde los socialistas volvieron a conseguir, tras más de cinco lustros, ser la fuerza más votada en la región. Aunque aquel triunfo electoral acabó en frustración tras la decisión de Ciudadanos de darle el Gobierno al Partido Popular, aquella victoria insufló muchos ánimos a los socialistas castellanoleoneses tras muchas derrotas electorales.
Es por ello que ni en Ferraz ni en Castilla y León se duda de que Tudanca volverá a ser el candidato (aunque se convocarán las correspondientes primarias), pero junto a esta certeza también existe el convencimiento de que se está en un contexto más difícil por un factor que a nadie se le escapa, el previsible desmembramiento de Ciudadanos y que se repitan los resultados de Madrid del 4 de mayo, que terminen en un Gobierno entre PP y Vox.
Tudanca, además de unir al partido, se ha trabajado la región, aunque le ha faltado en todo este tiempo proyección nacional. El líder burgalés se ha centrado en su territorio y su voz se ha oído poco en temas nacionales o en los debates internos del PSOE, donde siempre ha sido una personal leal con los planteamientos de Pedro Sánchez.
El líder socialista, forzado por lo ocurrido en Murcia, presentó una moción de censura que fracasó y, aunque se niega públicamente, nunca abandonó la posibilidad de repetir el intento con el apoyo de algunos diputados de Ciudadanos.
A Tudanca y al PSOE no les ha pillado de sorpresa el adelanto electoral. Tal vez, admiten, que haya sido tan inmediato, lo que atribuyen a los casos de corrupción que dirigentes del PP tendrán que afrontar en primavera. Pero en las filas socialistas se tenía claro que, de una forma o de otra, el PP no seguiría en el Gobierno hasta las elecciones autonómicas de 2023.
El PSOE está convencido que el adelanto electoral obedece a la estrategia dictada por Génova
En el PSOE se cree, además, que este adelanto electoral también está condicionado por la estrategia dictada desde Génova y que, más pronto que tarde, se adelantarán las elecciones en Andalucía.
De repetirse los resultados de Madrid, no cabe duda que el PP los utilizará para seguir pregonando un cambio de ciclo político y, a ser posible, un adelanto electoral a nivel nacional.
Pero el PSOE está preparado para ese escenario. Con los Presupuestos aprobados y el determinismo de Sánchez para acabar la legislatura, nada va a cambiar el calendario electoral previsto. Y, en cuanto al resultado, se da por hecho que el PP no conseguirá mayoría absoluta y, según previsiones y encuestas, su Gobierno podría estar condicionado por Vox, lo que no dejaría de ser un factor político que utilizarían los socialistas.
Dicho lo cual, los socialistas no arrojan la toalla y se volcarán en apoyar a Tudanca, y el primero que se implicará en la campaña será el propio Pedro Sánchez, que no suele rehuir estos envites aunque no tenga buenas cartas.
Comentarios de nuestros suscriptores/as
¿Quieres comentar?Para ver los comentarios de nuestros suscriptores y suscriptoras, primero tienes que iniciar sesión o registrarte.