"¿Habrá también una Espejel y un Armando en el próximo CGPJ?", ha cuestionado la portavoz de EH Bildu, Mertxe Aizpurua, desde los micrófonos del patio del Congreso. La pregunta iba dirigida a los partidos que sostienen el Gobierno, PSOE y Unidas Podemos, que junto a PP, han avalado este jueves (con varios diputados díscolos) a los cuatro candidatos para el Tribunal Constitucional.

Entre ellos, los dos propuestos por los conservadores, Enrique Arnaldo y Concepción Espejel, cuya idoneidad está en tela de juicio por los escándalos de corrupción que salpican al primero y por la proximidad de ambos al partido de Pablo Casado.

Como ha definido este jueves el propio diputado de Unidas Podemos Antón Gómez-Reino desde la tribuna, son "dos dirigentes del PP sin carnet" que este partido ha querido colocar "deliberadamente" en el acuerdo alcanzado hace varias semanas para la renovación de los órganos constitucionales, un pacto que no incluía la renovación del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ).

En este sentido, en vista de los acontecimientos y de la polémica suscitada por la inclusión de estas figuras jurídicas, y en medio de las negociaciones capitaneadas por el ministro de la Presidencia, Félix Bolaños, y el secretario general del PP, Teodoro García Egea, para renovar la cúpula del órgano de gobierno de los jueces, que acumula un retraso de 1050 días, las fuerzas políticas que dan apoyo al Gobierno en el Parlamento han mostrado su preocupación ante la posibilidad de que el PP cuele "nuevos sapos" en un eventual acuerdo para el CGPJ.

"El bien superior en la vida es la dignidad y la decencia. Lo que nos preocupa es que alguien así entre con un Gobierno de izquierdas y nos preocupa todavía más cuando una de las partes de la coalición es Unidas Podemos", ha señalado también el portavoz de ERC, Gabriel Rufián, ante los micros del patio de la Cámara Baja.

En este sentido, los portavoces de ERC, EH Bildu, BNG (acompañados del resto de fuerzas soberanistas), fuera del hemiciclo, e Íñigo Errejón (Más País) y Joan Baldoví (Compromís), desde la tribuna, han criticado a los partidos del Gobierno por dar su apoyo a estos candidatos, especialmente a Unidas Podemos.

"Sabemos que de vez en cuando hay que tragarse algún sapo, pero lo que algunos se tragan dentro, clama al cielo", ha sostenido Rufián, además de insistir en que el grupo morado tiene "fuerza para plantarse". Y es que, para la votación era necesaria una mayoría de tres quintos (210 diputados) y de haber rechazado los nombres propuestos por el PP, sus nombramientos no hubieran salido adelante.

"No deja de ser escandaloso que una fuerza que se proclama de izquierdas [por el PSOE] actúe de esta manera, pero quien más tiene que dar explicaciones es Unidas Podemos", ha señalado el diputado del BNG, Néstor Rego, que ha avisado de la factura que puede pasarle al grupo confederal su voto favorable en la elección de este jueves, más aún con la renovación del CGPJ en el horizonte. "Tenemos la certeza de que las personas que apoyaron a Unidas Podemos no van a entender esa decisión", ha remachado.  

Más País también ha lanzado otro aviso a navegantes de cara a las negociaciones para acometer la esperada renovación del único órgano constitucional pendiente: "Lo que mal empieza mal acaba, y parece que el PP le ha pillado el truco a este Gobierno. Esperemos que espabilen", sostiene a este medio.

En esta línea se pronuncia Compromís, que confía en que PSOE y Unidas Podemos "hayan entendido que hay que dialogar y pactar, pero que existen líneas éticas que no se deben traspasar".

El Gobierno urge a la renovación del CGPJ

Por su parte, el diputado morado que ha intervenido en el Pleno de este jueves en los puntos que afectaban a los nombramientos, Gómez-Reino, ha dejado claro que los votos de Unidas Podemos no son a favor de Arnaldo ni de Espejel, sino a favor "acabar con el secuestro al que el PP ha sometido a los órganos constitucionales y defender nuestra democracia de aquellos que solo la quieren desestabilizar".

El portavoz de Justicia del PSOE, Francisco Aranda, ha conminado al PP a restaurar "la normalidad democrática amputada" por sus "prácticas de bloqueo", esto es, a "completar lo antes posible la renovación del CGPJ sin más dilaciones injustificadas". Y, ante el escenario de que esto ocurra, los socios del Gobierno han elevado la presión nuevamente frente a este "reparto de cromos".